Estos son algunos de los mejores restaurantes vascos de Madrid

España y gastronomía es un binomio ganador. Y es que solo hay que hacer un repaso por los productos de nuestra tierra y las miles de recetas que llenan los libros de las mejores cocinas del país. Algunos de esos apreciados fogones se encuentran más allá de Burgos, es el caso de la gastronomía vasca. Un lugar donde el buen comer es casi como una religión.

Pero para cumplir con este ritual de mesa y mantel no hace falta irse hasta los restaurantes que se encuentran en Álava, Vizcaya o Guipúzcoa. Sin salir de Madrid, como en este caso, podemos probar algunos de los platos más típicos con sabor vasco, en unos establecimientos de la capital que hoy descubriremos cucharada a cucharada. 

Dantxari

Un ambiente clásico, con la madera como protagonista, sirve de escenario para nuestra primera parada culinaria. Estamos en Dantxari (@Dantxari_Madrid), en la calle Ventura Rodríguez número 8. Allí nos espera una carta que bebe de las raíces tradicionales de la gastronomía que se hace tanto en el País Vasco como en su vecina Navarra. 

Un saber hacer que lleva en la escena culinaria madrileña desde el año 1997, cuando abrió sus puertas este restaurante con el empuje y el tesón de sus tres socios. Dos de ellos con amplia experiencia en la cocina y un tercero en sala. Ellos son los que basan sus propuestas en las "materias primas de primera calidad" para idear recetas de toda la vida, como unos cogollos de Tudela con bonito y pimientos, unas croquetas de bacalao, unas imprescindibles alubias de Tolosa o unas manitas de cerdo deshuesadas. Pero si nuestra idea es tomar pescado, nada como decantarnos por un txangurro a la donostiarra o un rape con ajetes. 

Y no hay mejor manera para "brindar" por esta comida que haciéndolo con un postre: llega el turno del helado de canela y del tocino de cielo.

Pelotari

Solo ya con el nombre adivinamos que no es comida internacional. Estamos en pleno centro madrileño, en la calle Recoletos 3, en el Asador Pelotari (@PelotariAsador). Todo un homenaje, como cuentan sus responsables, al ya desaparecido frontón Recoletos que se ubicó aquí mismo. Desde entonces han pasado más de 20 años ofreciendo su cocina a todos los comensales que se sientan en sus mesas.

Tras elegir asiento en algunos de los salones con los que cuentan (Donosti, Txoko, Guetaria o Parrilla) nos disponemos a probar las recetas que tienen su base en los productos procedentes de Tudela y Vigo, entre otros proveedores. Esta es la base para que luego en la mesa aparezcan platos como los pimientos de piquillo o de Gernika, los espárragos directamente traídos de Navarra o las anchoas a la bilbaína como certeros entrantes.

Una vez hemos abierto el apetito, ahora es el turno de recetas más contundentes como el hígado de pato con alcachofas, el besugo a la parrilla, las patatas con rape o la sopa de pescado que resulta muy apetecible si el día ha amanecido frío. 

Sidrería Zerain

Hablar del País Vasco y de su gastronomía es también hacer referencia a su famosa sidra. Pero no hace falta irse a un caserío de los montes vascos para saborearla, sin movernos de Madrid también podemos hacerlo. Basta con acercarnos hasta el Barrio de las Letras, en la castiza calle de Quevedo. Allí, en el número 3, se levanta Zerain, una sidrería vasca, junto a alguno de los principales reclamos turísticos de la capital. 

Con la promesa de disfrutar de la "mejor tradición gastronómica vasca", como explican los dueños de este restaurante (@ZerainMadrid), reservamos mesa en un espacio decorado a conciencia para la ocasión. Hasta tienen kupelas que nos trasladan a una antigua sidrería guipuzcoana. Un marco único para empezar a leer una carta donde se incluyen como especialidades sus carnes a la parrilla o sus platos de toda la vida, como los chipirones, los tacos de bacalao o una ensalada de tomate navarro. 

Y ya que estamos en Zerain, es el momento para pedir algunos de los postres más conocidos y famosos de la cocina vasca. Es el caso de la pantxineta, el goxua o las tejas y cigarrillos de Tolosa.

Jai Alai

Nuestra siguiente y última parada nos lleva hasta uno de los locales clásicos de la ciudad en lo que a cocina vasca se refiere. Hablamos del conocido Jai Alai (@JaiAlai_Madrid), una casa de comidas que abrió sus puertas en la década de los años 20 en los bajos del emblemático frontón. Como curiosidad, merece la pena saber que fue Rufino Bustingorri, perteneciente a la familia de hoteleros que abrió el Jai Alai, el que trajo por primera vez las angulas frescas a Madrid. Era una petición de su clientela fiel. 

En el año 1965 cambió su ubicación y actualmente se localiza en el número 2 de la calle Balbina Valverde. Un traslado que, sin embargo, no ha cambiado con la esencia de ofrecer la tradicional cocina vasca a sus comensales. Así pues, en estos fogones del barrio de El Viso se preparan unas gambas al ajillo o una txistorra navarra a modo de aperitivo, además de unas espinacas a la crema, el clásico bacalao al pil pil o una perdiz en cazuela entre otras propuestas.