5 playas espectaculares del Algarve portugués que estás a tiempo de descubrir

Son cerca de 200 kilómetros de costa los que forman el Algarve portugués y muchos los motivos que invitan a descubrir esta región del país vecino: ciudades y pueblos con encanto, espléndidos paisajes naturales, deliciosa gastronomía basada en productos del mar... Pero, sin duda, es la belleza de sus playas lo que convierte al Algarve en un lugar único para disfrutar del Océano Atlántico en todo su esplendor.

Paisajes costeros del Algarve que impactan

La costa sur y suroeste de Portugal (@visitportugal) sorprende por sus paisajes llenos de contrastes. Son más de 100 playas, por lo que cualquier lista sobre las mejores o las más bonitas es subjetiva. En algunas, la belleza la dan las formaciones rocosas, talladas por la fuerza del mar en acantilados calizos. En otras, es la armonía entre la arena dorada y el azul intenso lo que impacta a primera vista. Aunque es difícil elegir, entre las playas que mejor reflejan este entorno natural único destacan:

Playa da Marinha

Es una de las “postales” que nunca faltan a la hora de explicar la belleza del Algarve. Se encuentra a pocos kilómetros de la ciudad de Lagoa y es de las que, por méritos propios, no falta en cualquier ranking de las mejores playas de Europa y del mundo. Entre acantilados e imponentes rocas, la arena encuentra espacio para formar pequeñas calas desde las que contemplar las mil tonalidades del mar turquesa. Los arcos naturales, que adornan la playa, son todo un símbolo del Agarve.

Playa da Falésia

Muy distinta a la anterior, esta playa es un arenal de casi 10 kilómetros, próximo a la localidad de Albufeira. Lo más curioso es el “muro” natural que parece protegerlo y da lugar a este particular paisaje costero. La planicie se interrumpe en un brusco cortado para dar paso al arenal, dejando al descubierto los colores del interior de la propia tierra, que van del blanco a los tonos marrones y ocres. El resultado es un espectacular telón de fondo que añade belleza a una playa inmensa, ideal para el descanso y los paseos inolvidables.

Playa de Beliche

Para algunos la más bella de todo el Algarve y, realmente, el contraste entre la arena dorada, las aguas turquesas y los oscuros acantilados del cabo de San Vicente crean una estampa espléndida. La playa cuenta con distintos servicios y en ella es posible practicar deportes náuticos. Contemplar un atardecer desde este lugar, en el extremo suroccidental de la Península Ibérica, es un privilegio.

Playa Dona Ana

En el municipio de Lagos se concentran algunas de las playas más bonitas de todo Portugal y una de ellas es Dona Ana, una maravillosa “postal" marcada por los acantilados y los enormes peñascos que emergen del agua. Perfecta para la práctica del snorkel, es una playa popular pero muy tranquila, en la que tienes distintos servicios de restauración.

Playa de Odeceixe

Esta particular playa se encuentra en la zona menos conocida del Algarve portugués, la llamada Costa Vicentina, justo en la “frontera” con la región del Alentejo. Es una playa abierta al mar, aunque protegida por oscuros acantilados, lo que la convierte en una de las favoritas de los amantes del surf. Se encuentra junto a la desembocadura del río Mira y, dependiendo de las mareas, puedes encontrar pequeñas lagunas y lenguas de tierra. Estas “piscinas” naturales son ideales para los más pequeños.