Miércoles 30 de abril de 2025
2 minutos
Ya hemos visto lo que ocurre con el transporte cuando se produce un apagón general: no funcionan el metro, los trenes, ni los tranvías y en las paradas de autobuses se forman colas impresionantes y largas horas de espera.
Solo han funcionado bien los automóviles, esos que están malditos y que, con argumentos no suficientemente válidos, se persiguen y se pretende expulsar de las ciudades.
Y por cierto, ¿servirá este grave incidente para darnos cuenta de que las energías renovables no dan estabilidad sinusoidal al sistema eléctrico y, por ello, hacen falta las hidroeléctricas y las nucleares, esas mismas que han acudido al instante a suministrarnos energía desde Francia y que aquí quieren cerrar?
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