Cómo prepararse para la jubilación: consejos y recomendaciones para que sea saludable

Hay personas que la esperan con ansias, mientras que otros quieren evitarla a toda costa, prefiriendo alargar su vida laboral tanto como les sea posible. En cualquier caso, la jubilación supone un gran cambio en nuestras vidas, es una nueva etapa vital y adaptarse a ella a veces requiere afrontar nuevos retos para los que hay que estar preparados. 

Pérdidas económicas, de relaciones sociales, cambios en la rutina, inicio de una nueva etapa... Son algunos aspectos a los que, por lo general, hay que hacer frente cuando llega este momento, que a veces puede darse de forma inesperada. Sin embargo, desde la Organización de Consumidores y Usuarios (@consumidoresocu) destacan que la jubilación también puede ofrecer nuevas posibilidades, de todo tipo, si sabemos aprovecharla. Y es que, tal y como indican, la jubilación no tiene por qué considerar una "puerta de entrada" a la vejez. 

De hecho, esta puede ser una etapa muy activa, en la que descubrir nuevos intereses y redescubrirse a uno mismo. En un momento en el que la idea de un envejecimiento activo está cada vez más extendida que nunca, la idea de que la jubilación es el final se ha quedado muy atrás. 

Consejos para una jubilación saludable

Desde la OCU dan una serie de recomendaciones para afrontar esta nueva etapa vital y prepararse para la jubilación: 

1. Cuestionar tus estereotipos: no puede ser que de la noche a la mañana se instaure en nosotros la idea del "yo ya no puedo". Apartar estas ideas preconcebidas y cambiarlas por otras más positivas y realistas mejoraran tu perspectiva ante esta nueva etapa. 
2. No detenerte ante posibles limitaciones económicas o físicas: en cambio, lo que debemos hacer es pensar en cómo podríamos hacerlo, adaptándolo a nuestras capacidades. 
3. Organizar el tiempo: pasar de una rutina a tener una gran cantidad de tiempo libre puede ser abrumador, por lo que organizarlo nos permitirá gestionarlo de mejor forma. ¿Cómo? Estableciendo nuevos horarios y rutinas, con tiempos de descanso, de autocuidado y de ocio. 
4. Probar cosas nuevas o retomar algunas pendientes: podemos aprovechar esta mayor tiempo libre para probar nuevos proyectos (viajes, estudios, actividades grupales y saludables..). 

Se trata de buscar aquello que nos llene y nos aporte bienestar y plenitud. Si después de todo, sentimos que nos cuesta adaptarnos a estos cambios, podemos acudir a un profesional de la salud para que nos ayude. 

Algunas empresas también cuenta con Programas de Preparación a la Jubilación para sus empleados. En cualquier caso, es recomendable conocer bien los distintos escenarios a los que nos podemos afrontar con la jubilación, tanto económicos y fiscales como personales.