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Medio centenar de personas mayores de Valladolid están partcipando esta semana en una experiencia inmersiva cultural con drones con la que se puede observar, mediante el uso de gafas FPV, detalles de la iglesia de San Pablo, mientras se ha llevado a cabo una medición de sus emociones.
Se trata de una iniciativa de la Asociación Ibérica de Municipios Ribereños del Duero de la que Valladolid forma parte y que tiene como objetivo promocionar el patrimonio cultural y natural de Valladolid, han informado fuentes del Ayuntamiento de Valladolid.
La experiencia piloto se ha realizado en la Plaza de San Pablo, donde los mayores, agrupados en grupos de cinco y en sesiones de 30 minutos, han podido ver la fachada de la iglesia a través de unas gafas de FPV conectadas a un dron.
Durante este tiempo, el personal de Ecogeo, responsables de los vuelos sin tripulación, han pilotado por diferentes espacios de la plaza mientras que los mayores han portado unos brazaletes inalámbricos con los que se han medido sus niveles de atención y emoción.
El Ayuntamiento de Valladolid, a través de la Sociedad Mixta para la Promoción del Turismo, ha colaborado con esta iniciativa facilitando la guía que ha ido explicando a los mayores cada uno de los detalles del patrimonio, y ha facilitado los trámites para poder realizar la actividad.
Este viernes se realizará de nuevo esta experiencia desde las 10 horas en la Plaza de Portugalete para dar protagonismo a las portadas de la Catedral y de la Antigua.
Esta actividad, titulada 'Experiencia sensorial piloto para el desarrollo y promoción del potencial turístico del espacio natural de la frontera Castilla y León-Norte de Portugal', está cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER, a través del programa de cooperación transfronteriza Interreg V A España-Portugal, POCTEP.