Dorothy Fideli tiene 77 años y el pasado sábado 13 de mayo se casó consigo misma en la residencia en la que vive, O'Bannon Terrace Retirement Community en Goshen, Ohio (Estados Unidos), donde se celebró la ceremonia, a la que acudieron amigos y familiares.
Fideli ya se había casado una primera vez hace 58 años con su exmarido con un vestido negro, "así que estaba condenada antes de comenzar", bromeaba. Tal y como contaba a Today, había hecho muchas cosas a lo largo de su vida, excepto esto, por lo que decidió casarse consigo misma para celebrar su amor propio y disfrutar por fin de la "gran boda" que siempre había deseado y que empezó a temer que nunca llegaría por ser "demasiado tarde".
El administrador del centro, Rob Geiger, fue quien dirigió la ceremonia, por petición de Fideli. "Es una mujer increíble y está llena de vida", y "siempre ha pensado en los demás", comentaba Geiger sobre ella.
La idea fue bien recibida también por la familia de Fideli. En concreto, su hija, Donna Pennington, no dudó en ayudarla a organizar todo lo necesario, tanto la comida, la decoración, como el vestido de novia, el cual no podía faltar. Llegado el gran día, Fideli admitió estar "nerviosa", aunque también "realmente feliz".
En un primer momento, Fideli pensó que esta celebración para sí misma podría animar también al resto de sus compañeros en el centro, afirmando que no era la primera vez que hacía "cosas locas solo para hacer reír a la gente", como probarse conjuntos y mostrárselos para animarlos. Pero, al final, la boda se convirtió en uno de los eventos más señalados y emotivos del centro, tanto para ella como para el resto de los asistentes.
"Esto es lo mejor que he tenido, además de tenerlos a ustedes. Esto es lo que siempre quise y estoy muy feliz de que me lo hayas dado", le dijo a su hija, agradeciéndole el conseguir hacer uno de sus sueños realidad. Y es que Fideli logró cumplir uno hace poco, cuando aprendió a leer, a base de mucho esfuerzo y noches sin dormir, después de 75 años en los que la gente "se burló de ella por eso y la menospreció", aseguró Geiger.
"Estoy en un punto de mi vida en el que ahora se trata de mí", explicaba, y es que, puesto que todos hijos y nietos se encuentran bien, considera que por fin es su momento de "hacer lo que quiero hacer".