¿Sin tiempo para la felicidad? Aquí tienes el truco para llenarte de ella a diario

¿Dónde está el secreto de la felicidad?

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Ya en junio de 2011 el Consejo Nacional de Prevención, Promoción de la Salud y Salud Pública de los EE. UU. identificó el bienestar mental y emocional como una de las siete áreas prioritarias en una Estrategia Nacional de Prevención para mejorar la salud pública.

Y es que cada vez hay más pruebas de que las mejoras en el bienestar se asocian con un menor riesgo de enfermedades mentales futuras, como reconocen algunos ensayos, y una mejor salud física, se recuerda en 'American Journal of Public Health'.  Fue por ello que el Equipo de Ciencia Traslacional de la Comunidad de la Universidad de California (Los Ángeles, EE.UU) propuso una iniciativa nacional de bienestar emocional. Paralelamente, proliferan las investigaciones sobre intervenciones para mejorar el bienestar emocional. Un ejemplo: el ensayo recogido en 'Affect Science'.

Aunque estas intervenciones son en gran medida eficaces, a menudo requieren tiempo, recursos personales y esfuerzo continuo, lo cual constituye un gran obstáculo. Además, los efectos de las mismas son heterogéneos y se necesitan estudios a gran escala para identificar variables sociodemográficas clave que puedan moderar sus efectos .

El bienestar emocional es multidimensional e incluye tanto la calidad de las experiencias momentáneas como los juicios de vida más amplios, recuerda un investigación recogida en la revista mencionada anteriormente. 

Bienestar emocional

Las personas con mayor bienestar emocional documentan  un menor deterioro físico, más actividad física, longevidad y una mortalidad reducida en poblaciones sanas y no sanas. Dados estos efectos protectores, no es sorprendente que exista un gran interés entre los líderes de políticas de salud y el público en promover el bienestar emocional para mejorar la salud mental y física pública.

Y la felicidad, como no, forma parte de ese deseado bienestar. Pero, ¿y sí estás demasiado ocupado para centrarte en tu propia felicidad? Investigadores, dirigidos por la Universidad de California, te ofrecen una sencilla solución.

Proyecto Gran Alegría 

Han probado la eficacia de una intervención de bienestar de una semana de duración, basada en la web, conocida como el Proyecto Gran Alegría. Esta consistió en microacciones diarias, que incluían pedirle a alguien que compartiera un momento divertido, inspirador o del que se sintiera orgulloso, crear una lista de agradecimientos y realizar un gesto amable para alegrarle el día a alguien.

Participaron aproximadamente 17.600 personas de todo el mundo: la mayoría eran de EE.UU, Canadá y Gran Bretaña (71%), mujeres (84%), blancas (74%), con al menos algún nivel de educación universitaria (94%). El trabajo ha visto la luz en el 'Journal of Medical Internet Research'.

Tras la intervención de siete días, los participantes reportaron mayores niveles de bienestar y emociones positivas, así como una mayor convicción de que su propio comportamiento puede promover la felicidad. También reportaron una disminución del estrés y una mejor salud y calidad del sueño. Los participantes más jóvenes, afroamericanos, hispanos y socialmente desfavorecidos fueron los más beneficiados.

Las mejoras en el bienestar se asocian con un menor riesgo de enfermedades mentales futuras y una mejor salud física. "Las personas con mayor bienestar tienen menos probabilidades de desarrollar enfermedades crónicas, como las cardiovasculares, y presentan una menor mortalidad tanto en poblaciones sanas como en personas con problemas de salud", ha afirmado en un comunicado la autora principal, la Dra. Elissa Epel.

Las intervenciones de bienestar en línea, que duran varias semanas y requieren de tres a cuatro horas semanales, han mostrado resultados favorables. Sin embargo, esta es la primera vez que una intervención breve muestra beneficios tan significativos, y podría ser efectiva para más personas.

"Muchas personas carecen del tiempo, la motivación y los recursos para comprometerse con estos programas más largos, y pueden ser más propensas a abandonarlos", ha declarado el primer autor Darwin Guevarra, quien también está afiliado a la Universidad de Miami.

Y ha insistido: "Estábamos entusiasmados por obtener resultados positivos en un programa que requería solo unos minutos cada día durante una semana".