¿Quieres dejar de fumar? Consejos para conseguirlo en vacaciones

Si le preguntamos a un profesional de la salud cuándo es un buen momento para dejar de fumar, lo más probable es que nos diga que cualquier fecha lo es y que lo más importante es mentalizarse de que debemos y queremos hacerlo. Dicho esto, si nos hemos planteado dejar de una vez por todas este mal hábito que tan perjudicial es para nuestra salud (y bolsillo), quizás sea un buen momento hacerlo en vacaciones. Veamos porqué.

Empezar bien

Los primeros días y semanas a partir de fumarse el último cigarrillo es el periodo en el que es más fácil fracasar en nuestro intento de dejar el tabaco. Que estos días coincidan con las vacaciones puede ser una ventaja ya que es un periodo en el que estamos más relajados y hay más distracciones que pueden facilitar que no pensemos tanto en fumar.

Romper con la rutina

Los expertos avisan de que el tabaco crea dos tipos de dependencias: la física y la psicóloga. La primera desaparece tras unos días sin fumar por lo que, si resistimos, dejará de ser un problema relativamente pronto. Pero la dependencia psicológica es otra cosa y cuesta más superarla. Por ello, recomiendan intentar dejar de fumar evitando aquellas rutinas o situaciones que nos recuerden al tabaco. En este sentido, las vacaciones ya son de por sí una forma de romper con la rutina y estar en entornos o realizar actividades nuevas que no están asociados con el tabaco. 

Marcar una fecha en el calendario

Por otra parte, se aconseja que a la hora de dejar de fumar lo hagamos de golpe marcándonos una fecha en la que abandonaremos el tabaco. Ir reduciendo el número de cigarrillos al día habitualmente no funciona por lo que, si estamos convencidos de que vamos a hacerlo, mejor elegimos un día y a por todas. Ese día puede ser el primero de nuestras vacaciones porque es una fecha deseada, que estamos esperando con ganas y así reforzamos nuestra decisión con el input positivo que trae las vacaciones. 

El deporte como aliado

Más puntos a favor de aprovechar las vacaciones para hacer desaparecer el tabaco de nuestras vidas es que el deporte es uno de los aliados para conseguir dejar de fumar por lo que podemos aprovechar el tiempo libre de las vacaciones para hacer ejercicio y mantenernos activos. No es necesario grandes esfuerzos, simplemente aumentar nuestra actividad habitual para disfrutar de las mejoras físicas que obtenemos sin fumar además de que es una buena opción para ayudarnos a controlar el peso y relajarnos. Además, aumentar nuestra actividad física es un hábito del todo recomendable para que se quede una vez acabadas las vacaciones. 

En definitiva, tenemos claro que el hábito de fumar no nos aporta nada positivo y cada día que fumamos incrementan las posibilidades de sufrir nefastas consecuencias para nuestra salud así que, como hemos dicho al principio, siempre es un buen momento para dejar de fumar, aprovechemos las vacaciones para conseguirlo.