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Los expertos llaman a la calma: la relación entre la melatonina y el mayor riesgo cardiaco es casual

Patricia Matey

Foto: Bigstock

Domingo 16 de noviembre de 2025

13 minutos

Tras publicarse un estudio que la asocia con más riesgo de insuficiencia cardiaca

Los expertos llaman a la calma: la relación entre la melatonina y el mayor riesgo cardiaco es casual (Bigstock)
Patricia Matey

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Domingo 16 de noviembre de 2025

13 minutos

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Se la conoce como la 'hormona del sueño' y cada vez más personas hacen uso de ella para lidiar con el insomnio. Se trata de la melatonina, que destaca porque su síntesis varía a lo largo de las 24 h dependiendo de la iluminación ambiental. Sus niveles aumentan en nuestro organismo cuando comienza a anochecer preparando así nuestro cuerpo para iniciar el sueño. También participa en otras funciones orgánicas como la regulación de la temperatura corporal y la tensión arterial. 

Según los Institutos Nacionales de la Salud de EE.UU, la 'hormona del sueño' se ha relacionado con el dolor de cabeza, los mareos, las náuseas, los calambres estomacales, la somnolencia, la confusión o la desorientación, la irritabilidad y la ansiedad leve, la depresión y los temblores, así como con una presión arterial anormalmente baja. También puede interactuar con medicamentos comunes y provocar alergias. 

Pero. ¿puede haber más? Un estudio preliminar, presentado en las Sesiones Científicas 2025 de la Asociación Americana del Corazón (AHA), la reunión que está teniendo lugar del 7 al 10 de noviembre en Nueva Orleans (EE:UU) y realizado con historiales clínicos de más de 130.000 adultos con insomnio que habían usado melatonina durante al menos un año, revela que tenían más probabilidades de ser diagnosticados con insuficiencia cardíaca, requerir hospitalización por esta afección o morir por cualquier causa.

Una llamada a la prudencia 

En él no se puede probar una relación de causa y efecto, pero plantea preocupaciones de seguridad sobre el uso de la melatonina, que está ampliamente disponible, lo que puede justificar más investigaciones sobre ella para evaluar su seguridad cardiovascular, han dicho los propios investigadores.

 

Dr. Eduard Estivill

Dr. Eduard Estivill

 

Y en esa línea, el Dr. Eduard Estivill, neurofisiólogo, pediatra y director de las Clínicas del Sueño Estivill, hace un llamamiento a la prudencia. "Siempre hay que ser muy cauto y muy precavido cuando se dan este tipo de noticias, especialmente cuando los periodistas intentan dar una buena información. Hay que ser muy prudente porque, sobre todo, se pueden manipular algunos datos y porque muchas veces la prensa menos seria tiende a magnificar estas situaciones: mira, ahora, la melatonina afecta al corazón y podemos acabar con una insuficiencia cardiaca".

Y hace especial hincapié en que los mismos autores "de esta nueva investigación recalcan que sus conclusiones no son definitivas y que se tiene que seguir estudiando esta relación".

De la misma opinión se muestra el Dr. Manuel Luján Bonete, especialista en Neurofisiología y Coordinador de la Unidad del Sueño del Hospital Quirónsalud San José de Madrid. "El estudio llama la atención por su tamaño muestral y consistencia estadística, pero sus conclusiones deben interpretarse con cautela. Es un ensayo observacional, no establece causalidad. La asociación reportada entre uso crónico de melatonina y mayor incidencia de insuficiencia cardiaca, hospitalización y mortalidad puede verse influida por sesgos. Confusión por indicación (no conocemos el grado de insomnio, es posible que aquellos pacientes con insomnio más severo, tengan más probabilidad de ser tratados con melatonina, comorbilidades no ajustadas y mezclan pacientes a los que les han recetado melatonina con otros que han podido comprar melatonina sin receta".

Recuerda, no obstante: "Los resultados deben hacernos replantearnos la visión extendida de la melatonina como suplemento totalmente benigno. Refuerzan la importancia de priorizar la intervención en medidas conductuales de higiene de sueño y la terapia cognitivo-conductual en el abordaje del paciente con insomnio crónico, así como evaluar trastornos del sueño concomitantes como los trastornos respiratorios durante el sueño. También resalta la necesidad de considerar la calidad y pureza de los suplementos y de avanzar hacia estudios que puedan aclarar si la asociación observada refleja un efecto directo o factores relacionados al perfil de riesgo de los usuarios".

Recordemos que la melatonina se produce naturalmente por la glándula pineal que ayuda a regular el ciclo sueño-vigilia. "Es un importante cronoregulador que viene muy bien para el 'jet lag'; para los trabajadores nocturnos que necesitan una ayuda para dormir por las mañanas. Las versiones sintéticas, químicamente idénticas se venden sin receta en muchos países, incluyendo el nuestro. Sin embargo, en EE.UU, la venta de suplementos sin receta no está regulada, por lo que la potencia, la pureza, etc., de cada marca pueden variar", documenta el Dr. Estivill.

Grupo 'con melatonina' y 'sin ella'

En este estudio, los investigadores clasificaron a las personas que habían usado melatonina a largo plazo (considerando como uso a largo plazo aquel que constaba en sus registros electrónicos de salud durante un año o más) como parte del 'grupo de melatonina'. En cambio, aquellos que nunca tuvieron 'apuntado' el uso de melatonina en sus registros médicos fueron clasificados como el 'grupo sin melatonina'.

"Los suplementos de melatonina podrían no ser tan inocuos como se suele creer. Si nuestro estudio se confirma, esto podría influir en cómo los médicos aconsejan a sus pacientes sobre los somníferos", ha afirmado el Dr. Ekenedilichukwu Nnadi, autor principal del estudio y jefe de residentes de medicina interna en SUNY Downstate/Kings County Primary Care en Brooklyn, Nueva York, durante la presentación del trabajo. 

 

Suplementos de melatonina. (Bigstock)

 

Los suplementos de melatonina se promocionan y comercializan como una ayuda segura para dormir; sin embargo, faltan datos que demuestren su seguridad cardiovascular a largo plazo, lo que impulsó a los investigadores a examinar si su altera el riesgo de insuficiencia cardíaca, específicamente en pacientes con insomnio crónico.

Según las Estadísticas de Enfermedades Cardíacas y Accidentes Cerebrovasculares de 2025 de la Asociación Americana del Corazón, la insuficiencia cardíaca se produce cuando el corazón no puede bombear suficiente sangre rica en oxígeno a los órganos del cuerpo para que funcionen correctamente y es una afección común que afecta a 6,7 ​​millones de adultos en EE.UU.

Utilizando una extensa base de datos internacional (la Red Global de Investigación TriNetX), los investigadores revisaron cinco años de historiales clínicos electrónicos de adultos con insomnio crónico que tenían registrado el uso de melatonina durante más de un año. Se excluyeron del análisis las personas con diagnóstico previo de insuficiencia cardíaca o que hubieran recibido prescripción de otros medicamentos para dormir.

Revelaciones

Entre los adultos con insomnio, aquellos cuyos registros electrónicos de salud indicaban un uso prolongado de melatonina (12 meses o más) tenían aproximadamente un 90% más de probabilidades de sufrir insuficiencia cardíaca en un plazo de 5 años en comparación con los no usuarios con características similares (4,6% frente a 2,7%, respectivamente).

Se obtuvo un resultado similar (un 82% superior) cuando los investigadores analizaron a personas a las que se les habían dispensado al menos dos recetas de melatonina con un intervalo mínimo de 90 días. (En el Reino Unido, la melatonina solo se dispensa con receta médica).

Un análisis secundario reveló:

  • Los participantes que tomaban melatonina tenían casi 3,5 veces más probabilidades de ser hospitalizados por insuficiencia cardíaca en comparación con los que no la tomaban (19,0% frente a 6,6%, respectivamente).
  • Los que consumían la hormona tuvieron casi el doble de probabilidades de morir por cualquier causa que los del grupo sin melatonina (7,8% frente a 4,3%, respectivamente) durante el período de 5 años.

"Los suplementos de melatonina se consideran ampliamente una opción segura y 'natural' para favorecer un mejor sueño, por lo que fue sorprendente observar aumentos tan consistentes y significativos en problemas de salud graves, incluso después de tener en cuenta muchos otros factores de riesgo. Me sorprende también que los médicos receten melatonina para el insomnio y que sus pacientes la usen durante más de 365 días, ya que la melatonina, al menos en EE.UU, no está indicada para el tratamiento del insomnio. Es importante que la gente sepa que no debe tomarse de forma crónica sin una indicación adecuada" ha declarado Marie-Pierre St-Onge, doctora en Filosofía, CCSH, FAHA, presidenta del grupo de redacción de la declaración científica de la AHA 2025, quien no ha participado en este estudio.

Es profesora, además, de medicina nutricional en la división de medicina general y directora del Centro de Excelencia para la Investigación del Sueño y los Ritmos Circadianos del departamento de medicina del Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia en la ciudad de Nueva York.

Limitaciones

El estudio presenta varias limitaciones. En primer lugar, la base de datos incluye países donde se requiere receta médica para la melatonina (como el Reino Unido) y países donde no (como EE.UU), y la ubicación de los pacientes no formaba parte de los datos anonimizados disponibles para los investigadores. Dado que el uso de melatonina en el estudio se basó únicamente en los registros de medicación de la historia clínica electrónica, todas las personas que la tomaban como suplemento sin receta en EE.UU. u otros países donde no se requiere receta médica habrían estado incluidas en el grupo sn melatonina; por lo tanto, los análisis podrían no reflejar esta realidad con precisión.

Las cifras de hospitalización también fueron superiores a las de diagnóstico inicial de insuficiencia cardíaca, ya que en la hospitalización se pueden registrar diversos códigos diagnósticos relacionados, que no siempre incluyen el código para un nuevo diagnóstico de insuficiencia cardíaca. Los investigadores también carecían de información sobre la gravedad del insomnio y la presencia de otros trastornos psiquiátricos.

"El empeoramiento del insomnio, la depresión/ansiedad o el uso de otros medicamentos para mejorar el sueño podrían estar relacionados tanto con el uso de melatonina como con el riesgo cardíaco. Además, si bien la asociación que encontramos genera inquietudes sobre la seguridad de este suplemento tan utilizado, nuestro estudio no puede probar una relación directa de causa y efecto. Esto significa que se necesita más investigación para evaluar la seguridad de la melatonina para el corazón", ha asegurado Nnadi.

Lo que sí está claro es que "la melatonina debe usarse bajo prescripción médica", declara el Dr. Estivill.

En pacientes cardíacos

Como precaución el Dr. Luján defiende: "Resulta prudente que los médicos indaguen en su uso en la anamnesis, especialmente en pacientes con enfermedad cardiovascular o factores de riesgo. La importancia de preguntar en la consulta no radica en considerar contraindicado su uso, sino que es relevante para valorar dosis, duración, motivos de uso, interacciones farmacológicas y alternativas. Esto permite un abordaje más integral del sueño y de la salud cardiovascular.

Melatonina en 'antiaging'

Eduard Estivill nos recuerda que "la melatonina es un poderoso antioxidante que puede enlentecer el envejecimiento. De hecho en muchas clínicas 'antiaging' de EE.UU lo usan y en mayores dosis. La utilizan, además, muchos médicos por lo que es evidente que si hay riesgos cardiacos dejarían su consumo. Lo que está claro entonces es que hay que utilizarla con control médico o farmacéutico y que no está bien que la usen 'todos'. Lo importante es tener en cuenta su utilidad en casos como los mencionados anteriormente para trastornos del sueño, como el jet-lag, pero no para reducir el estrés que impide dormir bien".

Para el doctor Bonete, "su como suplemento "antiaging" carece actualmente de respaldo robusto para su empleo generalizado. Aunque existen datos de estudios pequeños que sugieren efectos antioxidantes y reguladores del ritmo circadiano, con posibles beneficios cardiovasculares, éstos tienen un tamaño muestral limitado y extrapolar esto a un uso crónico en adultos sanos sin trastornos del sueño documentados resulta prematuro".

Recuerda, además, "que su recomendación indiscriminada banaliza el hecho de que es una hormona con efectos fisiológicos complejos. El estudio reciente refuerza la necesidad de ensayos clínicos aleatorizados, con seguimiento prolongado para evaluar seguridad y eficacia de su uso sostenido.

En cuanto a las evidencias científicas, este especialista nos apunta: "La literatura previa ha mostrado resultados heterogéneos en relación al uso crónico de melatonina"

  • En trastornos del ritmo circadiano y en insomnio en adultos mayores, algunos estudios han evidenciado mejoras modestas en latencia de sueño y calidad percibida, sin señales claras de daño en seguimientos de meses.
  • Ensayos pequeños han sugerido posibles beneficios cardiovasculares indirectos, como reducción de presión arterial nocturna y marcadores inflamatorios, aunque con tamaños muestrales limitados y periodos relativamente cortos.
  • No obstante, la evidencia a largo plazo (años) es escasa, especialmente en población general y en pacientes con comorbilidad cardiovascular. 

"En síntesis, existía una percepción favorable basada en estudios cortos y mecanísticos, pero la evidencia para uso crónico prolongado sigue siendo limitada y ahora se cuestiona más firmemente", apostilla el experto.

Sobre el autor:

Patricia Matey

Patricia Matey

Licenciada en Ciencias de la Información (Universidad Complutense de Madrid. 1986-1991), es periodista especializada en información de salud, medicina y biociencia desde hace 33 años. Durante todo este tiempo ha desarrollado su profesión primero en el suplemento SALUD de EL MUNDO (22 años), luego como coordinadora de los portales digitales Psiquiatría Infantil y Sexualidad en el mismo diario. Ha colaborado en distintos medios como El País, La Joya. la revista LVR, Muy Interesante, Cambio 16, Indagando TV o El Confidencial. En este último ejerció de jefa de sección de Alimente durante cuatro años. Su trayectoria ha sido reconocida con los premios de periodismo de la Sociedad Española de Oncología Médica, premio Boehringer-Ingelheim, premio de la Asociación Española de Derecho Farmacéutico, premio Salud de la Mujer, premio de Comunicación del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid o Premio de Periodismo de Pfizer. Actualmente es la responsable de la sección Cuídate+ sobre longevidad saludable de 65YMÁS.

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