Mariola Báez
Al aire libre
Las mejores rutas para acercarte sin hacer ruido al valle del Silencio
Al sur de la comarca del Bierzo, hay un lugar, en plena naturaleza, que rezuma belleza y sosiego
Tal vez fuera eso lo que encontraron monjes y ermitaños como san Fructuoso o san Genadio en este lugar, siglos atrás, y lo que les llevó fundar monasterios, hoy abandonados, o simplemente a retirarse en algún lugar recóndito del valle. El Silencio se encuentra en el paraje conocido como la Tebaida berciana, al sur del Bierzo, a unos 20 kilómetros de Ponferrada (@TurismoPonfe) en León y casi haciendo frontera con Galicia.
En realidad, forma parte de un valle mayor, el del Oza, por donde dibuja su recorrido el río del mismo nombre. Visitarlo supone descubrir un paraje de gran belleza, poco conocido, que guarda bosques, paisajes de alta montaña, pequeños riachuelos o saltos de agua y pueblos de arquitectura tradicional, en piedra y pizarra, que esconden alguna joya artística que no te esperas y más de una historia que despertará tu interés.
Las localidades del Valle
El valle del Silencio se ubica en la zona más baja de los Montes Aquilanos en la Comunidad Autónoma de Castilla y León (@CyLesVida) y ofrece distintos senderos para acercarte a su rico entorno natural, en el que no faltan las masas boscosas de robles o encinas así como abundante vegetación de ribera. Conocer la zona implica hacer un recorrido por sus pueblos más destacados. Tras años de progresiva despoblación, muchos de ellos han ido poco a poco recuperando protagonismo, sobre todo por la llegada de visitantes deseosos de descubrir lo que guarda este rincón secreto del Bierzo. Valdefrancos, San Clemente de Valdueza, considerado por muchos la puerta de entrada al Valle del Silencio o Montes de Valdueza, donde aún es posible contemplar lo que fuera la iglesia del antiguo Monasterio de San Pedro, son algunos de los puntos que debes incluir en una primera inmersión en este valle que conserva la tranquilidad que hace honor a su nombre.
De todas las localidades, la que no puedes dejar de visitar y puede ser tu punto de partida para descubrir el entorno natural es Peñalba de Santiago, considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
¿Qué guarda Peñalba de Santiago?
Peñalba, lugar de paso de los peregrinos que hacían el Camino de Santiago, se encuentra inmersa en el corazón del valle del Silencio, encamarado a una peña de la que probablemente toma el nombre. La vegetación exuberante que lo rodea, las casas tradicionales, muchas de ellas hoy establecimientos hosteleros o de turismo rural, y las espléndidas vistas que ofrece desde su posición privilegiada, han hecho que fuera declarado Conjunto Histórico Artístico en 1976.
Además, aquí vas a poder que visitar la iglesia de Santiago, una pequeña joya de arquitectura mozárabe que se estima fue edificada entre los siglos IX y X. Llaman la atención los arcos de herradura de sus ventanas o los vestigios que forman una extraña mezcla de estilos decorativos, desde símbolos procedentes, tal vez, de la cultura celta, hasta los grabados en estuco que pueden verse en la zona del coro. Sin duda todo un descubrimiento que hace a este pueblo aún más excepcional.
Desde aquí, la primera ruta que tienes opción de hacer es la que lleva a la cueva de San Genadio. Está a escasos dos kilómetros, a las fueras de la localidad, y puedes llegar, en un agradable paseo, ascendiendo por la ladera en un camino que te guía, entre frondosa vegetación, hasta una zona rocosa, donde verás distintas oquedades. Dicen que una de ellas fue la elegida por el santo como lugar perfecto de retiro y oración. La leyenda cuenta que el sonido del cercano río Oza molestaba al eremita en su meditación y que por eso, lo mandó callar. El río, obediente, propició el silencio absoluto, por lo que ya sabes de dónde viene el curioso nombre de este magnífico valle. En otra cueva anexa, los peregrinos que venían a visitar el oratorio del santo comenzaron a llevarse pequeñas porciones de tierra por sus supuestas propiedades milagrosas, algo que hoy, más de uno sigue haciendo (nunca se sabe).
Esta pequeña ruta es una estupenda opción para conocer parte del paisaje berciano y dejarte llevar por su halo de misterio.
¿Qué otras rutas puedes planificar?
Desde Peñalba tienes otra bonita excursión algo más larga, de unos 14 kilómetros, en una ruta circular, que te llevará por un entorno natural lleno de bellos contrastes hasta el monasterio de San Pedro, en Montes de Valdueza, pasando, además, por una antigua herrería próxima a la localidad. Arroyos, bosques, pequeñas praderas y la silueta de las cumbres de los montes Aquilanos como telón de fondo.
Si te apetece y estás en forma, también puedes animarte la recorrer la llamada senda de los monjes con la que puedes recorrer las localidades más importantes del Valle, desde Peñalba, hasta Valdefrancos. Son casi 20 kilómetros pero si quieres disfrutar del contacto con la naturaleza y huir del “mundanal ruido”, este camino es ideal para lograr tu objetivo.