Carlos Losada
Al aire libre
No es el Cañón del Colorado, sino las Barrancas de Burujón
Te sorprenderá el paisaje formado con la erosión provocada por el paso del río Tajo
Hay ocasiones en las que no imaginamos que cerca de nosotros puede haber un paraje que alberga tal belleza. Y eso es lo que ocurre cuando se circula en coche por la CM-4000, ya que a su paso por la localidad de Burujón (Toledo) se encuentran estas barrancas creadas por la erosión del río Tajo.
Su denominación real es Barrancas de Castrejón y Calaña y destacan por la belleza de sus cortados, así como por albergar una fauna muy rica. Conocerlas es tan sencillo como estar dispuestos a dar un paseo y, por qué no, llevar un teléfono o una cámara para capturar las mejores fotos.
Cómo se llega a las barrancas
Tal y como se ha apuntado, el acceso se realiza por la CM-4000. Muy cerca de la salida se encuentra un primer aparcamiento, donde es una buena opción dejar el coche. Otra posibilidad es conducir por la pista que se va a recorrer a continuación, ya que se puede llegar a las barrancas sin necesidad de caminar.
No obstante, lo más recomendable es hacer algo de ejercicio, ponerse un calzado cómodo y llegar hasta los primeros “cortados” a pie. Una vez allí tendrás ante ti toda la magnificencia del paisaje y varios miradores desde los que disfrutarlo. En total no tardarás más de media hora. Asimismo, dispones de la posibilidad de recorrer alguno de los senderos que las rodean. Y para los que tengan mejor movilidad, existe la opción de bajar hasta una distancia más cercana al agua.
Un día de picnic
Se trata por lo tanto de una visita que invita a hacer un picnic, ya que hay un merendero habilitado para ello, así como para pasar una buena jornada al aire libre sin cansarse demasiado. Eso sí, si la excursión se hace en los meses de más calor, hay que tener en cuenta que apenas hay sitios a la sombra en las horas centrales del día. Por ello, el mejor momento del año para acercarse a las barrancas es la primavera o el otoño.
Hay que señalar son un Monumento Natural desde 2010 y que es el hogar de numerosas especies de aves, como es el caso del águila-azor perdicera, el búho real, el aguilucho lagunero, el cernícalo o el gavilán, por poner solo unos ejemplos.