Islas Marías, un paraíso que ha dejado de ser prisión de máxima seguridad

Hace más de dos años que se anunció el cierre de la prisión de máxima seguridad en las Islas Marías, en México. Dos años en los que se ha trabajado para convertir este archipiélago en el Pacífico en una reserva natural, dejando atrás su historia de más de un siglo como prisión de máxima seguridad. De hecho, era conocida como el Alcatraz mexicano.

El presidente López Obrador (@lopezobrador) anunció el cierre definitivo de la Colonia Penal Federal Islas Marías, la última isla-prisión de América Latina, tras 114 años en un conjunto de cuatro islas paradisíacas en el Océano Pacifico, frente a las costas de Riviera Nayarit. Se trata de un entorno privilegiado que la Unesco ya declaró en 2010 Reserva de la Biosfera.

Cárcel convertida en centro educativo

Las cuatro islas que forman este archipiélago son María Madre, la de mayor tamaño y la que albergaba la prisión además de los únicos asentamientos de población, María Magdalena, María Cleofas y San Juanito. Puerto Balleto es el principal núcleo de Isla María Madre.

Desde este verano y tras dos años de remodelación, la cárcel se ha convertido en un centro educativo que promueva el respeto y la protección de la diversidad. También se han rehabilitado las antiguas instalaciones de la isla principal. Porque desde los años 70, los familiares de los prisioneros podían vivir con ellos en este “paraíso”. Solo los presos más peligrosos estaban cerrados entre muros y barrotes.

Ahora mismo, las islas tienen un único acceso por barco desde Mazatlán a la mayor de las islas. Dos grandes arcos pintados en colores pastel y una imagen de Nelson Mandela dan la bienvenida al lugar al que llegarán los visitantes, que se espera que sea este mismo verano.

Aunque, el objetivo de las autoridades es preservar este entorno del turismo masivo, por lo que no se construirán hoteles y las visitas serán de un día, no se va a permitir pernoctar en la isla. Todas las actividades turísticas permitidas serán sostenibles, de respeto por el entorno y donde la comunidad local será protagonista.

Entre las actividades que los turistas podrán realizar están la visita al Museo de Sitio, donde se conocerá la historia de la prisión y los presos más ilustres, senderismo, excursiones al Cristo de Puerto Balleto, tiendas de artesanía, etc.

Y, por supuesto, los visitantes podrán disfrutar de sus maravillosas playas y de actividades como el snorkel, el surf o el buceo, gracias a la diversidad de la vida marina que alberga este archipiélago. Eso sí, con precaución, ya que hay más de una veintena de especies de tiburón. Es, además, un lugar ideal para el avistamiento de ballenas.