¿Para qué sirven los Servicios Sociales? La desesperada situación de mi madre

Me dirijo a los lectores con gran preocupación y tristeza para denunciar la lamentable situación que atraviesa mi madre, una mujer de 78 años, y expresar mi profunda indignación con respecto a la ineficacia de los servicios sociales en nuestra comunidad.

Mi madre es una persona independiente que ha trabajado arduamente durante toda su vida, que no ha hecho otra cosa que sufrir y que tuvo que ver hace muchos años cómo mi único hermano se quitaba la vida lanzándose por la ventana delante de ella. Fue precisamente en la casa de la que ahora nos desalojan.

Mi madre se encuentra actualmente en riesgo de ser desahuciada de la casa que ha sido nuestro hogar durante décadas, debido a que mi padre, titular del contrato, enfermó y tuvo que ser trasladado a una residencia. Como mi madre no figura en el contrato, a pesar de llevar 50 años en la casa, la respuesta brutal, terrible e inhumana de los desalmados de la inmobiliaria ha sido solicitar su salida de la casa, sin preguntarle en qué situación queda, sin interesarse por saber si podrá salir adelante, faltándola al respeto, tratando a mi madre como a una basura. A pesar de su avanzada edad y su vulnerable situación, los Servicios Sociales no han brindado la ayuda necesaria para evitar este desalojo injusto.

Es desgarrador ver cómo a mi madre se le han ofrecido opciones inadecuadas, como refugiarse en un albergue junto a personas con problemas de drogadicción, o ser trasladada a una residencia de mayores, a pesar de ser plenamente capaz de cuidar de sí misma. Lo que necesita es una vivienda adecuada y segura donde pueda mantener su independencia y disfrutar de sus años dorados en paz.

La falta de recursos económicos nos ha dejado sin alternativas viables. Nos enfrentamos a la dolorosa realidad de que, si no se toma acción inmediata, mi madre, con la avanzada edad que tiene, se verá obligada a vivir en las calles, desprovista de cualquier tipo de protección y reducida a la triste condición de una persona sin hogar, vulnerable y desamparada.

Es inaceptable que en una sociedad que se jacta de ser justa y solidaria, nuestras personas mayores, aquellos pilares fundamentales sobre los que se construyó nuestro país, sean abandonados a su suerte en momentos de necesidad. No podemos permitir que los Servicios Sociales se limiten a ofrecer soluciones que no se adaptan a las necesidades individuales de las personas, como es el caso de mi madre.

Invoco a la solidaridad de aquellos que tengan la capacidad de brindar ayuda en esta situación desesperada. Rogamos a aquellos con influencia y recursos que intervengan para evitar esta terrible injusticia y proporcionen a mi madre una vivienda digna y segura donde pueda vivir de manera independiente y tranquila.

Asimismo, insto a las autoridades competentes a revisar urgentemente los procedimientos y políticas implementadas en los Servicios Sociales, con el fin de garantizar que realmente se brinde la asistencia adecuada y personalizada a las personas en situación de vulnerabilidad, como es el caso de mi madre.

Espero sinceramente que esta carta sirva para generar conciencia sobre el fracaso de los Servicios Sociales y movilizar a la comunidad y a las autoridades hacia una acción efectiva y justa.

Agradezco de antemano su atención y espero que se tomen medidas inmediatas para rectificar esta situación.

Ayúdennos. Es muy urgente.

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