Definitivamente sí, comer de pie no es muy aconsejable que digamos si tenemos en cuenta muchas de las advertencias de los especialistas. Y es que, como apuntan desde UCB Pharma (@ucb_iberia), "la mayoría de las personas tienen algún problema de digestión a lo largo de la vida". Y no comer sentados, de forma pausada y consciente, en un mínimo de 20 minutos, es un factor clave para tener esas molestias en nuestro estómago.
De hecho, nadie hace una comida copiosa de pie. Normalmente, en esta postura tomamos pequeños bocados o una tapa con una bebida a modo de cena más informal o cuando comemos un bocadillo deprisa y corriendo ya que no nos da tiempo a prepararnos nada más completo y equilibrado. No nos damos cuenta, pero de esta forma lo que estamos haciendo es exigir al estómago un esfuerzo que no es nada saludable.
Además, estando en esa posición muchas veces realizamos otra actividad al mismo tiempo (mirar la televisión o el móvil, por ejemplo). Para comer, lo mejor es hacerlo sin distracciones ya que de esta manera seremos conscientes de qué comemos, cómo y cuánta cantidad.
Estando de pie, nuestro aparato digestivo no se relaja y está como en alerta; por tanto, empieza a trabajar al mismo tiempo que vamos comiendo. En resumidas cuentas, de repente hay una indigestión ya que el estómago no es capaz de digerir tal cantidad de comida en tan breve espacio de tiempo. Además, se suele echar mano en esos casos de "comida rápida".
Por tanto, si queremos proteger nuestro estómago y ahorrarnos problemas como una gastritis o una úlcera estomacal si abusamos de este negativo hábito, lo mejor es seguir unas pautas para comer de forma ordenada. Lograrás tener una buena digestión.
Hinchazón abdominal o dolor en el estómago después de comer pueden ser algunas de las consecuencias negativas de una mala digestión. Por ello, lo mejor es seguir una serie de saludables consejos: