Ignacio Casanueva
Ignacio Casanueva es redactor especializado en temas de tecnología y salud.
… saber más sobre el autorLos meses fríos que comenzamos se caracterizan por el frío, una temporada que para la piel que está expuesta puede ser muy dura, como la de la cara y las manos. En esta última no es de extrañar que tiendan a resecarse más cuando bajan las temperaturas. Los cambios bruscos, como por ejemplo al salir de casa a la calle, o de la calle a un local, ayudan a eliminar la hidratación natural de la piel de nuestras manos. El resultado: se vuelven ásperas, secas y se agrietan.
Además, cuando la temperatura baja, nuestro cuerpo produce menos lípidos, que son importantes para que nuestra piel forme una barrera protectora resistente a las agresiones externas.
También hay otros factores a tener en cuenta durante los meses de invierno. Por ejemplo, solemos en la actualidad nos lavamos más las manos para no contagiarnos el COVID-19 asi como otras enfermedades como gripes y resfriados; pero el uso de agua caliente y jabones agresivos puede dañar la capa protectora externa de la piel, causando que pierda aún más hidratación.
Existen diferentes formas para devolver ese aspecto suave e hidratado a las manos. EL principal son las cremas hidratantes. Durante el invierno no hay que utilizar una crema hidratante cualquiera, y no sirve la corporal, sobre todo cuando el daño ya está hecho. Las cremas de manos son capaces de hidratar, reparar y calmar la piel. No salgas a la calle sin ponerte una capa de esta crema antes, además de aplicarla varias veces durante el día o por lo menos siempre después de lavarnos las manos y antes de acostarnos.
Los guantes hidrantantes también son una opción, aunque está menos extendida. Se utilizan cuando las manos ya están afectadas, agrietadas y cortadas. No se usan solo cuando salimos a la calle, sino antes d eirnos a la cama para potenciar el efecto de la crema. Se trata de guantes especiales que en su interior contienen sustancias que hidratan y protegen, y que deben utilizarse durante 30 minutos.
Si no quieres que el invierno pase factura a tus manos, y estas parezcan envejecidas, sigue a diario estos consejos: