Preguntas

Diazepam, Bromazepam y Alprazolam... se recetan para el insomnio, pero no son iguales

Marco Herrera

Foto: Bigstockphoto

Domingo 6 de septiembre de 2020

ACTUALIZADO : Miércoles 19 de mayo de 2021 a las 13:13 H

8 minutos

Estos antidepresivos pertenecen al grupo de las benzodiacepinas pero no son exactamente iguales

¿Te cuesta conciliar el sueño? Un doctor revela los trucos para conseguirlo
Marco Herrera

Foto: Bigstockphoto

Domingo 6 de septiembre de 2020

8 minutos

La ansiedad se es algo cotidiano en la vida de muchos españoles y puede afectar a nuestra forma de comportarnos. Se trata con terapia psicológica y también recetanfo medicamentos que combaten la depresión, las benzodiacepinas. Las  tres que más aparecen en las recetas que llegan a las farmacias son diazepam, bromazepam y alprazolam. Son parecidos, pero en ningún caso son  iguales.

Función y prescripción

En términos generales, todas ellas funcionan ayudando a aumentar la actividad del ácido gamma-aminobutírico (GABA). GABA es un neurotransmisor, un mensajero químico que transmite señales por todo el cuerpo. Si el cuerpo no tiene suficiente GABA, el individuo puede sentir depresión.

Estas medicinas se usan para tratar este tipo de trastornos, incluso el alprazolam funciona para calmar los ataques de pánico. En cambio, el diazepam también se ocupa de otras afecciones, como la abstinencia aguda de alcohol, los espasmos del músculo esquelético, los trastornos convulsivos y el trastorno crónico del sueño. En lo que respecta al bromazepam, además de combatir los síntomas de la ansiedad, su consumo puede aliviar los problemas digestivos, respiratorios o del ritmo cardíaco que puede implicar ese nerviosismo.

Compra de medicamentos por internet

Interacciones

Dietética

En primer lugar, si se toma diazepam, se deben evitar grandes cantidades de pomelo e incluso su jugo. Y es que el pomelo bloquea la enzima CYP3A4, que ayuda a descomponer ciertos medicamentos. Por lo tanto, tomar en exceso esta fruta puede aumentar los niveles de diazepam en el cuerpo, incrementando también el riesgo de efectos secundarios.

En cambio, el bromazepan y el alprazopan no muestran ninguna interacción de importancia con los alimentos. Únicamente se recomienda ingerirlos antes o junto a los comidas para potenciar su absorción, aunque en el caso del alprazopan la diferencia puede ser mínima.

Interacciones con la drogas

Los tres pertenecen a la misma familia de medicamentos, por lo que comparten muchas interacciones con otras medicinas y sustancias. Los que afectan al sistema nervioso central pueden ser peligrosos cuando se combinan con benzodiacepinas. Eso es porque pueden afectar al sistema respiratorio.

Varios de los grupos que interactúan son el alcohol, los antihistamínicos, otras benzodiacepinas o sedantes, como pastillas para dormir y medicamentos para la ansiedad y analgésicos, como hidrocodona, oxicodona, metadona, codeína y tramadol. También los antidepresivos, estabilizadores del ánimo y antipsicóticos, los medicamentos anticonvulsivos y los relajantes musculares pueden presentar problemas.

Siempre se debe informar al médico y al farmacéutico sobre todos los medicamentos y suplementos que se toman antes de comenzar a tomar cualquier prescripción nueva.

Dependencia y abstinencia

Las preocupaciones más serias sobre el uso de diazepam, bromazepam y alprazolam son la dependencia y la abstinencia. Muchas personas pueden volverse dependientes de estos medicamentos después de unas semanas. Quienes usan estos medicamentos pueden desarrollar una tolerancia con el tiempo, y el riesgo de dependencia aumenta cuanto más tiempo los usen.

El riesgo de dependencia y abstinencia también aumenta a medida que se envejece. Ambos pueden tener efectos más prolongados en los adultos mayores y demorar más en abandonar sus cuerpos. Estos efectos pueden ocurrir con los tres medicamentos, por lo que si supone una preocupación, se debe consultar con el médico. Tampoco se debe dejar de tomar estos fármacos abruptamente. Suspender estos medicamentos demasiado rápido puede conducir a la abstinencia

Los efectos secundarios que comparten estas tres benzodiacepinas incluyen somnolencia, fatiga, problemas del habla, confusión y problemas de memoria. El diazepam puede incluir diarrea, erupción cutánea y euforia. Las diferentes secuelas del alprazolam incluyen estreñimiento y cambios de peso. En cuanto al bromazepam, su consumo también puede producir alucinaciones, irritabilidad, cambios en la libido, alteraciones en la vejiga y debilidad muscular con problemas de equilibrio, algo muy preocupante en personas mayores con riesgo de caídas. Eso sí, estos casos suceden raramente.

Si tienes ansiedad nocturna estas son las claves para combatirla

¿En qué se diferencian estas benzodiacepinas?

Aunque estos tres fármacos parezcan muy similares y su objetivo sea el mismo, también presentan algunas diferencias que pueden determinar su uso. Eso sí, es muy importante aclarar que el consumo de un medicamento u otro dependerá del estado del paciente y las recomendaciones del doctor.

Pero volviendo a sus características, si comparamos, por ejemplo, el diazepam y el bromazepam, la duración de sus efectos sí presenta algunos cambios. El primero puede mejorar el estado del individuo hasta 50 horas, mientras que el bromazepam reduce su actuación a la mitad, aunque su acción máxima se extiende a las tres horas. En cambio, el diazepam pierde efectividad una hora después de su ingesta. No obstante, de los tres, el alprazopan es el más potente, así que se recomienda tomarlo con precaución.

Además, según una encuesta difundida por la OCU (@consumidores), en la que participaron más de 12.000 usuarios, los medicamentos que proporcionan una mayor eficacia percibida son el bromazepam y el alprazolam frente al diazepam, que también es el que menos puntuación recibe en lo que respecta a la satisfacción con la ausencia de efectos secundarios

¿Y el lorazepam?

Es otro tranquilizante, también considerado sedante-hipnótico o ansiolítico. El lorazepam se usa para tratar los síntomas de ansiedad, insomnio (problemas para dormir) y el estado epiléptico (un tipo de convulsión severa). También se administra antes de la cirugía para hacer dormir al paciente.

Efectos secundarios

Entre sus interacciones, puede causar somnolencia, mareos, dolor de cabeza, náuseas o visión borrosa. Otros efectos menos habituales son el cambio en la capacidad sexual, estreñimiento, acidez estomacal o cambio en el apetito. Si alguno de estos efectos persiste o empeora, hay que informar al médico de inmediato. La inmensa mayoría de las personas a las que se le receta lorazepam, no tienen efectos secundarios de ningún tipo.

Algunos productos que pueden interactuar con este medicamento incluyen la clozapina, kava, oxibato de sodio (también conocido como gamma hidroxibutirato o GHB). El riesgo de efectos secundarios graves (como respiración lenta o los mareos intensos) puede aumentar si este medicamento se toma con otros productos que también causen somnolencia o problemas respiratorios.

Es clave informar al médico o farmacéutico si se están tomando otros productos como analgésicos opioides o analgésicos (como codeína, hidrocodona), alcohol, marihuana (cannabis), otros medicamentos para el sueño o la ansiedad (como alprazolam, diazepam, zolpidem), relajantes musculares (como carisoprodol, ciclobenzaprina) o antihistamínicos (como cetirizina, difenhidramina).

Sobre el autor:

Marco Herrera

… saber más sobre el autor