Teresa Rey
Preguntas
Para qué se utiliza un monitor Holter y cuándo se indica
Es un aparato para medir los ritmos cardiacos de forma continua y detectar si se tienen arritmias
El monitor Holter es un aparato que se utiliza para medir los ritmos cardiacos de forma continuada durante un periodo que puede durar entre las 24 y 48 horas. Se trata de una prueba médica que se prescribe si el facultativo considera que se debe hacer un control de estas características en pacientes que manifiestan un dolor en el pecho o poseen síntomas de latidos irregulares o arritmias.
Control de un día
Estamos hablando de un aparato que funciona con pilas y no es muy grande, de modo que es posible llevarlo en un bolsillo o bolsa. Está formado por una serie de cables, entre cinco y siete, en cuyo extremo se hallan unos discos de metal o electrodos y que se ubican sobre el pecho del paciente. Estos electrodos son los que van a captar los impulsos eléctricos del corazón para después trasladarlos al aparato.
A su vez, va registrando las actividades que se realizan mientras se lleva puesto y cómo se siente el paciente. Se recomienda efectuar un registro manual paralelo de todo lo que se efectúa, así de cómo se siente en cada momento, para que luego el médico pueda contrarrestar toda la información.
No es doloroso
Llevar el monitor Holter no es doloroso, en todo caso algo molesto, sobre todo al principio. Nos lo tienen que colocar en la consulta y quitarlo allí mismo también. Al tener que pegar los electrodos al pecho, al que se adhieren por medio de un gel, es recomendable rasurar la zona para evitar incomodidades. Y en ocasiones para evitar que los claves se muevan y haya errores en las lecturas, es probable que se use cinta adhesiva para sujetar bien los cables.
Hay que tenerlo puesto entre 12 y 24 horas, y aunque sea tedioso, el profesional de la salud le indicará que tiene que apuntar absolutamente todo lo que hace. Habrá que registrar por escrito qué se hizo y la hora. Todo esto es para comprobar que no hay contradicciones entre lo indicado por el aparato y cómo ha sido nuestra actividad a lo largo del control. Por otra parte, el dispositivo no se puede mojar, ni acercarlo a imanes ni aparatos de alto voltaje.
Una vez pasado el periodo indicado los expertos nos lo quitarán y el doctor hará una evaluación completa de nuestro ritmo cardiaco, para detectar si realmente se presentan o no arritmias y qué tratamiento adoptar si es necesario.