Noelia Hontoria
Preguntas
Qué es un pulsioxímetro y por qué es interesante tener uno en casa
Este aparato te ayudará a medir tu pulso y tu nivel de oxígeno en sangre, dos datos muy útiles
Existen algunos aparatos médicos que puedes tener en casa y que tienen un precio mucho más económico de lo que piensas. Un claro ejemplo es el pulsioxímetro, que te ayudará a controlar mejor tu estado de salud y a darle más datos a tu médico cuando vayas a consulta.
Para qué sirve un pulsioxímetro
Un pulsioxímetro es un aparato que te permite medir tu pulso y tu nivel de oxígeno en sangre. Esto puede ayudar no solo a detectar una variación grave e importante que necesite asistencia inmediata, también es una buena guía para configurar tu historial clínico y para que tu doctor cuente con más información para sus diagnósticos. La medición del nivel de oxígeno en sangre ayuda, entre otras cosas, a saber si las células están recibiendo el nível óptimo de oxígeno, mientras que el pulso es un indicativo sobre la salud del corazón.
La mejor parte de estos aparatos es, además de ser bastante baratos son también muy fáciles de utilizar.
Los más comunes están formados por un pequeño dispositivo que incorpora los sensores oportunos y una pantalla. Para utilizarlo, solo tendrás que introducir el dedo en la máquina, pulsar un botón y esperar unos segundos a que aparezca la información en pantalla.
A la hora de elegir tu nuevo pulsioxímetro es interesante que busques uno que tenga una buena precisión, para que los resultados sean totalmente veraces. Para ello, puedes pedir opinión a tu médico o farmacéutico, leer opiniones en Internet, tener en cuenta la marca si confías en alguna de la que ya tengas este tipo de aparatos médicos en casa…
Un pulsioxímetro se puede comprar además de en numerosos comercios electrónicos, en farmacias, grandes superficies y tiendas de tecnología y salud. La horquilla de precios de este aparato va desde los 15 a los 40 euros, aunque por supuesto podemos encontrar propuestas más profesionales y, por tanto, más caras.
En todo hogar hay, al menos un termómetro, pero no en todos existen pulsioxímetros o tensiómetros, otro de los aparatos médicos más prácticos. En las personas mayores es especialmente interesante tener esta ayuda en casa, ya que es el grupo de pacientes que más a menudo tienen que controlar sus constantes y que más información le deben dar al médico. Llevar un registro en un cuaderno o en unas notas en el móvil puede ser muy útil, pero, en caso de que el doctor no te pida que lleves un seguimiento exhaustivo, tampoco debes obsesionarte con este tema.
El pulsioxímetro puede ser utilizado por el propio paciente o por sus familiares y allegados, si detectan que algo no va como debería, conocer el pulso y el nivel de oxígeno en sangre es un buen indicador para saber si deben pedir ayuda inmediata ante un posible problema de emergencia que pueda estar sufriendo su familiar.