Marco Herrera
Internacional
Tiene más de 70 años y está cruzando el Atlántico en un barril
Marco Herrera
Jueves 17 de enero de 2019
ACTUALIZADO : Lunes 18 de febrero de 2019 a las 23:54 H
2 minutos
Partió desde Canarias en un barril de 3 metros de largo por poco más de 2 de diámetro
Corría el pasado mes de diciembre cuando Jean-Jacques Savin (Arès, Francia, 1947) echaba su barril-cápsula a las aguas de la isla de El Hierro, en el archipiélago canario. Este exmilitar francés parece tenerlo todo calculado para, en unos tres meses, alcanzar las costas del Caribe aprovechando el impulso de las corrientes de aire favorables del mar.
Meses trabajando en ello
Tras varios meses trabajando en la cápsula en su localidad natal de Arès, al suroeste de Francia, el septuagenario galo ha comentado que el barril está fabricado de madera contrachapada recubierta de plástico, con la intención de repeler los ataques de orcas y otros grandes cetáceos, así como de ofrecer resistencia al fuerte oleaje que puede encontrarse. El barril pesa unos 450 kilos vacío y en su interior contiene bolsas de aire, una pequeña cocina, una cama en forma de litera y un almacén. Una escotilla transparente en el suelo de la cápsula concederá a Savin el privilegio de ver las profundidades del océano mientras navega.
La aventura no le es ajena a Savin. En su carrera militar fue paracaidista y después también ha trabajado como piloto y como guardabosques. El aventurero contaba como espera simplemente llegar por el impulso de las corrientes, y no tener que recurrir a una vela o remos. "Quizá alcance Barbados, aunque me gustaría más una isla francesa, como Martinica o Guadalupe. Facilitaría el tema del papeleo y poder transportar luego el barril", explicaba.
En mitad del recorrido, Savin soltará marcadores en algunos puntos para al observatorio marino internacional JCOMMOPS con el fin de ayudar a los oceanógrafos a estudiar y comprender las corrientes. También el galo será estudiado para ver el comportamiento de la soledad prolongada en el encierro. Y hasta una botella de Burdeos que llevará a bordo será luego comparada con otra guardada en tierra. El septuagenario francés ha conseguido recuadar 60.000 euros aproximadamente, principalmente de patrocinadores y una parte en una campaña de crowdfunding.