Jubilación anticipada: hay que superar la pensión mínima para poder cobrarla
La legislación establece un umbral mínimo para aprobar la solicitud
Muchos trabajadores quieren jubilarse antes de tiempo, pero no siempre es posible acceder a la jubilación anticipada. Uno de los motivos más habituales de denegación es que la pensión estimada no alcanza el mínimo legal establecido, independientemente de los años cotizados o la edad del solicitante. Esta situación se da incluso en carreras laborales largas, y sorprende a quienes desconocen los requisitos económicos que deben cumplirse.
Para empezar, la legislación establece un umbral mínimo de pensión que depende de la edad y la situación familiar del trabajador. Si la cuantía resultante tras aplicar los coeficientes reductores de la jubilación anticipada queda por debajo de ese mínimo, la Seguridad Social puede denegar la solicitud.
Actualmente, la normativa establece la cuantía mínima de la pensión de jubilación en 1.127,60 euros mensuales si se tiene un cónyuge a cargo. Y 830 euros mensuales si no lo está.
Para entenderlo con un caso práctico, Alfonso Muñoz Cuenca, funcionario de la Seguridad Social y conocido por compartir información relevante sobre las pensiones, pone el siguiente ejemplo: un trabajador con más de 40 años de cotización podría no poder jubilarse anticipadamente si la pensión estimada queda por debajo de lo que la ley considera suficiente para garantizar un nivel mínimo de ingresos en la jubilación.
Las modalidades de jubilación anticiada
Existen varias modalidades de jubilación anticipada. La más común es la voluntaria, que permite retirarse hasta dos años antes de la edad legal siempre que se cumplan los requisitos de cotización y antigüedad.
La otra es la jubilación anticipada involuntaria o forzosa, vinculada a despidos colectivos, reestructuraciones o cierres de empresa, que también requiere un número elevado de años cotizados, aunque suele tener coeficientes reductores menos severos.
Antes de presentar la solicitud, los especialistas recomiendan calcular la pensión estimada y verificar que supere el mínimo legal. Si no es así, existen alternativas para aumentar la cuantía, como retrasar la jubilación unos meses, continuar cotizando, o valorar fórmulas parciales de jubilación que permitan mantener ingresos suficientes.
En definitiva, jubilarse anticipadamente requiere no solo años de trabajo, sino también asegurarse de que la pensión resultante cumpla los criterios legales. Conocer las diferentes modalidades y planificar con antelación es clave para evitar sorpresas y garantizar un retiro estable y seguro.



