Consejos para que las hormigas no entren en casa

La presencia de las hormigas en terrazas, patios y jardines es un indicador de que el frío acaba y la naturaleza “despierta”. Si bien las hormigas son completamente inofensivas y no son portadoras de enfermedades para la salud de las personas, se trata de un insecto que forma grandes colonias que acaban siendo una molestia cuando invaden el interior de nuestra casa, un espacio donde encuentran todo aquello que necesitan para su subsistencia: alimento y condiciones ambientales mucho más favorables que las del exterior.

Prevención

Para evitar la presencia de hormigas en casa lo primero que hay que hacer es aplicar un método de prevención y después utilizar productos que las ahuyenten. Estos consejos te ayudarán.

• Observar: si las hormigas ya han entrado en casa es interesante observar qué recorrido hacen y así detectar su vía de acceso. Su manera de operar es enviando desde el nido unas hormigas exploradoras, aquellas que detectamos solas. Estas hormigas cuando encuentran alimento avisan a su comunidad que sale de su hormiguero siguiendo el rastro de feromonas que ha dejado la exploradora, formando un camino de ida y vuelta desde los alimentos hasta el hormiguero, de ahí la importancia de impedir que las exploradoras avisen a su comunidad.

• Tapar pequeños orificios: las hormigas acceden a nuestro hogar por cualquier grieta o pequeño orificio por lo que será necesario taparlos con masilla o silicona, por ejemplo, los agujeros que se forman entre las juntas de las baldosas de la pared y las del suelo y el zócalo. No está de más revisar los enchufes de pared, especialmente en aquellas zonas donde guardamos los alimentos como pueden ser la cocina y la despensa; y también aquellos otros espacios donde puedan haber caído migas.

• Impedir su acceso a los alimentos: cocina y salón son las estancias más comunes donde encontrar hormigas, debido a la presencia de alimentos. Por esta razón hay que tener cuidado en no dejar comida al alcance de las hormigas. Esto significa guardar los alimentos en envases herméticos que no desprendan olor y al que no puedan acceder, procurar que no estén manchados (cuidado con el tarro de la miel) y, además, barrer concienzudamente ambos espacios, en especial si pueden haber caído migas de pan o alimentos con azúcar.

Ahuyentadores naturales

En el mercado podemos encontrar un buen abanico de productos para acabar con la presencia de las hormigas en el hogar. Son productos químicos que pueden poner en riesgo la salud de nuestras mascotas, o de nosotros mismos, si por accidente entran en contacto con los alimentos. Por ello, siempre es mejor optar por aquellos productos naturales, que además solemos tener en casa. Estos son algunos de ellos:

• Vinagre: es uno de los productos con más soluciones en el hogar y, cómo no, también sirve para ahuyentar a las hormigas. Podemos preparar una disolución a partes iguales de agua y vinagre y rociar con ella aquellas zonas donde hemos detectado la presencia de hormigas. Mientras dure el olor las hormigas no se acercarán y si vamos rociando ese punto periódicamente conseguiremos que modifiquen sus rutinas.

• Limón: la acidez de este cítrico tienen un efecto similar al del vinagre. Puedes diluir el zumo de limón en el agua de cubo para fregar el suelo o hacer, al igual que con el vinagre, una disolución a partes iguales con agua y rociar el mármol de la cocina. Además, conseguiremos dejar un aroma muy agradable para nosotros, pero muy incómodo para estos insectos.

• Laurel, menta, ajo y café: son productos que desprenden un olor muy desagradable para las hormigas. Así, podemos preparar unos saquitos de tela con estos alimentos: unos con dientes de ajo o granos de café, para colocar en los armarios de la cocina; otros con menta o laurel, para los cajones de los cubiertos, del pan o para los estantes y la despensa.

• Bicarbonato: puedes utilizarlo mezclado con agua para limpiar las superficies de la cocina o espolvorear los rincones en los que hayas detectado la presencia de estos insectos.