Cerlesky Pérez
Economía familiar
Estos son los barrios más económicos para alquilar en Madrid y Barcelona
El 66% de los jóvenes aún vive con sus padres por la falta de alquiler asequible, según la OCU

El esfuerzo de una pareja joven para pagar el alquiler de un pequeño piso en Madrid y Barcelona les supone destinar el 43% y el 51%, respectivamente, de sus ingresos, según concluye un reciente análisis de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que ha identificado las zonas más y menos asequibles para alquilar vivienda en las dos mayores ciudades españolas. Su estudio analiza el precio medio de pisos de segunda mano en buen estado, con ascensor y 90 m² construidos, en 114 barrios de Madrid y 43 de Barcelona.
Siete barrios por debajo de 1.000€ al mes en Madrid
En la capital, Pavones (distrito de Moratalaz) se sitúa como el barrio más barato, con un alquiler medio de 810€/mes para un piso de 90 m2. Le siguen San Andrés (Villaverde) con 815€, Los Rosales (Villaverde) con 884€, Orcasitas (Usera) con 885€, Zofio (Usera) con 900€, el casco histórico de Vallecas con 947€, San Fermín (Usera) con 976€, Fontarrón (Moratalaz) con 1.027€ y Puerta Bonita (Carabanchel) con 1.028€.

Se trata de barrios del sur y sureste de la ciudad, alejados del centro, con baja presión turística y abundante vivienda social, aunque en muchos casos la calidad constructiva es limitada y el porcentaje de edificios rehabilitados es reducido.
Solo un barrio por debajo de 1.000€ en Barcelona
Porta, situado en el distrito de Nou Barris, es el único barrio que baja de los 1.000€ de media, con un alquiler mensual de 996 €/mes para un piso de 90 m2. Tras él se sitúan Sant Andreu (1.397€), Sant Martí de Provençals (1.516€), Vilapicina i la Torre Llobeta (1.553€), El Guinardó (1.604 €) y, en Sants-Montjuïc, La Font de la Guatlla (1.685 €) y Hostafrancs (1.698 €). Estas zonas suelen ser periféricas, con edificios antiguos, menor oferta de ocio y servicios y escasa presión turística.
La organización alerta de que el pago del alquiler exige a las parejas jóvenes un desembolso muy superior al límite del 30% de los ingresos recomendado para mantener otros gastos básicos. En promedio, el esfuerzo asciende al 51% en Barcelona y al 43% en Madrid. Recuerdan que, mientras los precios de la vivienda llevan una década al alza, los salarios no han crecido al mismo ritmo, retrasando la emancipación: el 66% de los jóvenes de 18 a 34 años continúa viviendo con sus padres, 16 puntos por encima de la media de la Unión Europea.

Desde la organización se reclama un plan de inversión en vivienda pública de alquiler, con al menos 600.000 viviendas nuevas o de segunda mano, así como incentivos para que los propietarios rehabiliten y alquilen sus inmuebles vacíos. También pide agilizar los procesos de desocupación en casos de impago y destinar las ayudas económicas a los colectivos más vulnerables.
Además, insta a revisar la fiscalidad para facilitar la compra de vivienda por parte de los jóvenes, dado que las reducciones en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales varían entre comunidades y el tipo reducido del IVA del 4% solo se aplica a la vivienda protegida. “Es urgente pasar de las declaraciones a los hechos” para ampliar la oferta de vivienda social y frenar la creciente dificultad de acceso a la vivienda en las grandes ciudades.