Tres de cada cinco europeos que todavía no se han jubilado piensan que están en vías de conseguir la renta de jubilación que desean. Ese número aumenta hasta el 66% en España, el 64% en Alemania y el 63% en Suiza. Italia, por su parte, marcha rezagada con un 50%. Como cabía esperar, quienes obtienen rentas más altas suelen expresar más confianza que los que perciben rentas más bajas. En general, los hombres expresan una mayor confianza sobre su futuro como pensionistas que las mujeres; así, el 64% de los primeros asegura estar en la vía adecuada, frente al 52% de las segundas.
Es una de las conclusiones del Informe 2025 sobre el sentimiento de los inversores europeos elaborado por la gestora de fondos Fidelity International. Lo cierto es que las percepciones varían mucho entre los diferentes países. Así, según este estudio os suizos estimaron que necesitarían unas rentas anuales de alrededor de 93.000 euros para vivir desahogadamente durante la jubilación, mientras que los españoles necesitaban alrededor de la mitad. En los seis países encuestados, la renta media estimada para vivir cómodamente durante la jubilación ronda los 52.000 euros anuales.
Aportaciones a planes de pensiones
La jubilación es una prioridad para los inversores minoristas europeos y muchos de ellos están dando los pasos adecuados. Sin embargo, las limitaciones de tipo sistémico hacen que sigan sin estar suficientemente preparados para afrontar una jubilación más larga. De acuerdo con el estudio, en la que participaron 5.500 personas de Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, España y Suiza, los encuestados mencionaron como prioridad, por encima de cualquier otra meta financiera, las aportaciones a sus planes de pensiones. Este imperativo, citado por un 39% de encuestados, se impuso a “Mantener mi estilo de vida actual” y “Reunir un fondo de emergencia” dentro de los tres principales objetivos financieros.
Infllación, el mayor riesgo de cara a la jubilación
El optimismo de los inversores en relación con la capacidad para jubilarse cómodamente presupone una inflación estable, unas rentas constantes, unos gastos predecibles y la ausencia de circunstancias negativas en el plano personal, en los mercados y en las políticas de las autoridades. Ninguno de estos supuestos se sostiene. "Es más, con el incremento de la esperanza de vida ha aumentado el riesgo de no disponer de una renta suficiente durante la jubilación", aseguran desde Fidelity.
Aunque las personas sienten confianza, están muy preocupadas. Por ejemplo, la inflación fue mencionada por el 42% de los encuestados próximos a la jubilación como una gran barrera para conseguir sus objetivos de jubilación. Aunque la inflación trasciende fronteras, el grado de preocupación que expresan los encuestados varía. Por ejemplo, en España y la inflación fue mencionada como un gran obstáculo por el 47% de los encuestados, siendo el país donde más preocupante resulta.
La salud como fuente de gastos imprevistos
El último de los tres principales obstáculos para una jubilación adecuada son los gastos imprevistos, que fueron mencionados por el 31% de los encuestados. Las obligaciones familiares, las urgencias médicas y las reparaciones sobrevenidas en el hogar son difíciles de predecir, pero comunes en la práctica.
Las inquietudes en torno a la salud durante la jubilación son las que predominan, ya que fueron mencionadas por el 42% de los encuestados. Entre las personas de 55 años o más, esa cifra aumenta hasta el 45%, de acuerdo con la encuesta.
Con un 44%, las mujeres se preocupan más por los problemas de salud que los hombres, con un 41%. Ello es debido, tal vez, a que las mujeres son más longevas y, por lo tanto, tienen una mayor probabilidad de necesitar más cuidados a largo plazo. Entretanto, los sistemas públicos de salud están sometidos a presiones cada vez mayores, lo que provoca déficits de cobertura que trasladan más costes a los ciudadanos.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.