Ramón Sánchez-Ocaña
Opinión

La batalla de la celulitis

Ramón Sánchez-Ocaña

Lunes 17 de mayo de 2021

4 minutos

La batalla de la celulitis

Lunes 17 de mayo de 2021

4 minutos

Píldoras

La celulitis es una especie de obesidad muy localizada, sobre todo de la cintura para abajo. Como bien saben muchas lectoras, forma una especie de cartucheras, como pantalones de montar, en la parte superior de los muslos. También se localiza en la parte superior de los brazos, por la parte de abajo. En líneas generales, es una distribución poco estética de la grasa.  Quien tiene celulitis confiesa que tiene la sensación de que esa zona está como recubierta por una grasa que no es suya...

Es casi exclusiva de la mujer y afecta a un 90 por 100. Los primeros rasgos aparecen en la edad prepuberal, cuando hay una redistribución de las grasas en el organismo femenino. De cien casos de celulitis, ochenta aparecen a esa edad. Y el resto, hacia los quince años. Lo que ocurre es que esa celulitis no se hace visible hasta mucho tiempo después: cuando los músculos empiezan a perder consistencia y los tejidos fibrosos a perder elasticidad. De todos modos, el hecho de que  sea a esa edad cuando empieza a desarrollarse la celulitis, hace pensar en otro grupo de causas, como son las hormonales. También hay factores metabólicos. Y claro está, genéticos: una madre celulítica, fácilmente tendrá hijas celuliticas.

Efectos de la celulitis

El primer efecto de la celulitis se observa en el tejido graso, el que está bajo la piel. Ahí están las células -adipocitos- que reciben la grasa. En las personas celuliticas, esos adipocitos pierden capacidad para expulsar la grasa, y por eso, aumentan de tamaño. Al ensanchar, toda la zona adquiere mayor volumen. Y empieza una compresión de las pequeñas venas que hay en la zona, lo que dificulta la circulación.

Un segundo efecto se advierte en el tejido vascular. Por un lado, debido a la presión de esas células ensanchadas y por otro, a la degeneración de las paredes de los vasos, hay mayor dificultad circulatoria. Hay salida de líquido a los espacios que hay entre las células. Esa es una de las primeras razones de esa “piel de naranja”. Debajo de la piel, está nuestro tejido conjuntivo, que es el que sirve de sostén a las células grasas, los nervios, los vasos sanguíneos. Ese tejido es como una red en la que se instalan esas células. Pues bien, la celulitis va transformando el cemento que une esas fibras, los nudos de la red, en una palabra. Es lo que los especialistas llaman la polimerización. Ese tejido de sostén se va convirtiendo poco a poco en tejido fibroso. Entonces se forman tabiques, celdas, donde sin posibilidad de salida se va acumulando tejido graso.

En una nueva fase, en el centro de ese volumen se va formando una masa de líquidos gelatinosos. Eso que se llama sustancia geloide Las células grasas van degenerando y aparecen esos nódulos pequeños, típicos de la afección .

¿Qué podemos hacer?

  • No son aconsejables las prendas muy ajustadas, porque dificultan la circulación.
  • Una dieta rica en hidratos de carbono, harinas, pastas, azúcares, ayuda a que la celulitis se instale en el organismo. Una alimentación rica en grasa tampoco es aconsejable.
  • No necesariamente por llevar faja o comer mucho dulce, muchas patatas o mucha grasa se va tener celulitis. Todo eso no la produce, pero son factores que pueden ayudar a desarrollarla.
  • Procure mantener su peso correcto. Puede permitirse subir o bajar de peso 2 kilos. Si sobrepasa ese tope, sin tomar medidas, su piel se volverá fláccida. Si tiene que subir o bajar de peso,  hágalo poco a poco.
  • Es muy útil beber mucha agua: Alrededor de dos litros diarios,
  • La ducha diaria es muy aconsejable. El agua estimula la circulación. Si tiene tendencia a la obesidad o a la celulitis utilice al ducharse un guante de masaje en las zonas más peligrosas.
  • Si no puede controlar su peso, acuda a un especialista. Recuerde que el mejor remedio contra la obesidad es evitarla.

En resumen

La celulitis es un proceso. A veces va acompañado de obesidad, pero no es lo mismo. Hay gente delgada que padece celulitis. Por eso, debe tener claro que un régimen para adelgazar no va a eliminar la celulitis. No haga mucho caso de soluciones mágicas. Puede haber soluciones, claro. Pero ningún tratamiento serio es cuestión de magia. Acuda a especialistas y tenga en cuenta que en muchos casos hay tratamientos que suelen ser lentos.

El masaje suele ser útil, como lo es todo lo que active la circulación. Pero es cierto que si ese masaje es demasiado intenso, puede ser perjudicial.

Sobre el autor:

Ramón Sánchez-Ocaña

Ramón Sánchez-Ocaña

Ramón Sánchez-Ocaña (Oviedo, 1942) es miembro del Comité Editorial de 65Ymás. Estudió Filosofía y Letras y es licenciado en Ciencias de la Información. Fue jefe de las páginas de Sociedad y Cultura de El País, y profesor del máster de Periodismo que este periódico organiza con la Universidad Autónoma de Madrid. 

En 1971 ingresa en TVE. En una primera etapa se integra en los servicios informativos y presenta el programa 24 horas (1971-1972). Entre 1972 y 1975 continúa en informativos, presentando el Telediario. No obstante, su trayectoria periodística se inclina pronto hacia los espacios de divulgación científica y médica, primero en Horizontes (1977-1979)​ y desde 1979 en el famoso Más vale prevenir, el cual se mantiene ocho años en antena con una enorme aceptación del público.

Tras presentar en la cadena pública otros dos programas divulgativos, Diccionario de la Salud e Hijos del frío, fue fichado por Telecinco para colaborar primero en el espacio Las mañanas de Telecinco y posteriormente en Informativos Telecinco.

Es colaborador habitual de radio, periódicos y revistas, y autor de una veintena de libros, entre los que destacan Alimentación y nutrición, Francisco Grande Covián: la nutrición a su alcance, El cuerpo de tú a tú: guía del cuerpo humano, Guía de la alimentación y Enciclopedia de la nutrición

En 2019 entró en el Comité Editorial del diario digital 65Ymás, en el que colabora actualmente.

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