Cuando hablamos de tomar vitamina C lo primero que dibujamos mentalmente es una naranja o quizá un limón. Pero, ¿son estos alimentos los que más vitamina C tienen? Realmente no, de hecho dentro de su grupo, las frutas, tampoco son las que más ácido ascórbico incluyen, que es como también se llama a esta vitamina. Eso sí, en general, las frutas y verduras son las que más tienen esta vitamina hidrosoluble.
La vitamina C tiene propiedades antioxidantes pues nos protege de los radicales libres y también produce colágeno, que ayuda a la cicatrización de las heridas. Favorece la absorción de hierro, protege las mucosas y reduce la susceptibilidad a infecciones. Al mismo tiempo, evita la aparición de la enfermedad del escorbuto, y hemorragias espontáneas en las encías y en la piel, apuntan en la Fundación Española del Corazón.
Las ingestas recomendadas diarias son de 90 mg en el caso de los hombres, y en el de las mujeres de 75 mg, indican desde el Instituto Naciones de Salud de Estados Unidos (NIH).
Estos son algunos de los alimentos en lo que podemos encontrar vitamina C:
El perejil posee aproximadamente 200 mg de vitamina C por cada 100 gramos. Esta planta que se emplea para aderezar numerosos platos y es uno de los alimentos más ricos en este nutriente.
La papaya es la fruta que más vitamina C presenta con unos 82 mg por cada 100 gramos, seguida del kiwi con 71 mg. A continuación tenemos a las fresas con 60 mg, y después la naranja y el limón con 50 mg. En menor cantidad, se encuentra en el pomelo, el mango, la piña o las moras.
El pimiento es, dentro de este grupo, el más abundante en esta vitamina con 120 mg por cada 100 gramos, después tenemos la col de Bruselas con 100 mg, y el berro con 87 mg. También la encontramos en proporciones menores en la coliflor, la col, el tomate, los espárragos, la espinaca, la cebolla o los puerros.
Los hígados de cerdo, ternera, vaca y pollo poseen esta vitamina en cantidades que oscilan alrededor de los 20 mg. Y también los riñones de cerdo, cordero y ternera.