Con la llegada del otoño, disfrutamos también de la presencia de nuevas frutas y verduras en el mercado, que regresan fieles a su temporada de cosecha. Las uvas, la granada, el kiwi, la calabaza y las castañas son solo algunas de ellas, sin embargo, hay un alimento que sus seguidores esperan con ansia en esta época del año: el higo.
Símbolo de paz y prosperidad en algunas religiones, el higo ya formaba parte de la dieta del ser humano en el Neolítico, pues algunos restos de esta fruta fueron encontrados en puestos de excavación que datan de dicho periodo. Después, los egipcios y los griegos continuaron disfrutando de sus virtudes, las mismas que lo han convertido en la actualidad en una de las frutas más populares del otoño. ¿Qué beneficios nos aporta su consumo?
Además de su sabor dulce y textura jugosa, debes incluir el higo en tu alimentación debido a las múltiples propiedades nutricionales que comparte contigo. En primer lugar, es una fruta que posee grandes cantidades de fibra dietética, que regula el sistema digestivo y te puede ayudar a controlar el peso. Además, es rica en minerales esenciales, como el calcio, el cobre, el potasio y el magnesio, y vitaminas K y B6.
No obstante, una de las sustancias más valiosas de su composición son los polifenoles, grandes aliados de los mayores pues protegen el sistema inmunológico gracias a sus cualidades antiinflamatorias, previenen las enfermedades cardiovasculares y combaten los efectos del envejecimiento debido a su poder antioxidante. ¿Qué otras virtudes disfrutan los higos?