Se considera cáncer oral a los tumores malignos que pueden aparecer en cualquier lugar de la boca, incluyendo labios, encías, interior de las mejillas, paladar o lengua. La Asociación Dental Americana (@AmerDentalAssn) señala como principales factores de riesgo hábitos nocivos como fumar o beber alcohol en exceso, apuntando que el grupo de población donde existe mayor riesgo es el de las personas mayores de 50 años, afectando más a los hombres que a las mujeres.
El 85% de los casos de cáncer oral se diagnostica tarde. Este es el dato preocupante que recuerda el Consejo de Dentistas de España (@ConsejoDentista) y que, sin duda, justifica la necesidad de revisar nuestra boca cada seis meses. Una mancha, una pequeña llaga, aparentemente sin importancia, o un minúsculo bulto, que no mejoran o desaparecen pasadas unas semanas, merece consultar con el dentista, porque podrían suponer una señal de alarma.
Hacer una autoexploración bucal es muy fácil. Solo requiere observar con atención cada una de las zonas de nuestra boca, realizando para ello una serie de gestos frente a un espejo. Algo tan simple puede ser vital.
Además de la necesaria higiene bucodental y de las revisiones periódicas, al menos una vez al año si ya has superado los 60, es importante el estudio de la propia boca para detectar cualquier posible anomalía, de la que tú te darás cuenta de manera inmediata.
Cada año se diagnostican en España 7.000 nuevos casos de cáncer oral. La detección precoz, mediante la autoexploración bucal puede salvar vidas. Una pequeña herida que no termina de cicatrizar, manchas blancas u oscuras, molestias al tragar, o presencia de pequeños bultos requieren la visita inmediata al dentista.