Prótesis e implantes defectuosos que pueden tener graves riesgos para la salud

Es fácil adivinar que si compras una prótesis o un implante por Internet y en una página de calidad un tanto dudosa, lo normal es que eso tenga consecuencias, en algunos casos graves, para nuestra salud, tal y como alertan desde la Sociedad Española de Medicina Estética (@SEMEstetica). Y es que estas partidas defectuosas pueden poner en riesgo la salud de las personas, algo especialmente significativo cuando hablamos de personas mayores. Pero también es algo que se ha dado en los dispositivos implantados en hospitales públicos y privados de nuestro país. 

Por explicarlo en números, solo en la última década en todo el mundo se produjeron casi 5,5 millones de incidentes como consecuencia de esos fallos en prótesis e implantes. Si lo reducimos a nuestro país, podemos hablar de 8 complicaciones al día por un producto de estas características entre los años 2007 y 2017.

Graves daños

"La venta en canales no controlados puede llevar al contrabando de productos falsificados o que no cumplan con los requisitos sanitarios oportunos de calidad y esterilidad", explican estos expertos, que inciden en que esto se traduce en toda una serie de problemas médicos serios que, en algunos casos, vienen acompañados de secuelas en ocasiones irreparables.

En nuestro país, es la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (@AEMPSGOB) la que se encarga de autorizar esos productos. Pero esto no quita que algunas empresas se salten esa inspección pasando los controles en países más benévolos en este sentido. Este fue el problema que provocó hace años la muerte de una mujer octogenaria por los problemas de su prótesis ortopédica de cadera y que en otros casos provocaba que los pacientes sufrieran fuertes dolores, problemas de movilidad o la rotura de los tornillos de dicho dispositivo.

También estos años se han conocido casos de implantes para el aumento de pecho con una calidad defectuosa que hacía que tuviesen una tasa de rotura siete veces mayor que otros modelos. Esto hacía que ese gel se dispersase por todo el cuerpo sin posibilidad de eliminarlo de forma completa. Por no hablar de la situación anímica y psicológica con la que se encuentran muchas de las mujeres afectadas. 

Estos casos hicieron que en el país vecino, Francia, se llegasen a retirar del mercado algunos modelos de implantes mamarios por su posible riesgo a la hora de provocar un cáncer linfático.

¿No hay suficientes controles?

Problemas que se han dado, como hemos conocido en los medios de comunicación, en prótesis de cadera o en implantes mamarios. Sin embargo, la lista de productos defectuosos es más amplia. Así, entre los dispositivos que han registrado más fallos y problemas en los últimos años podemos encontrar desde bombas electromecánicas que inyectan insulina, pasando por marcapasos, stents, lentes intraoculares o incluso sistemas de diálisis peritoneal para tratar la insuficiencia renal y que fallaban por tener catéteres mal fabricados.

Es por ello que entidades como la Organización de Consumidores y Usuarios (@consumidores) demandan la importancia de implantar controles de calidad de los productos que se colocan dentro del cuerpo, tanto antes como después de la comercialización. Y más si tenemos en cuenta que, en la mayoría de los casos, permanecerán años alojados en el interior de estos pacientes.

Es entonces cuando uno se puede preguntar si no se siguen los controles suficientes en este sentido. Como explican en este caso, esa inspección no es tan rigurosa como si se tratase de un medicamento que se va a poner a la venta, ya que en este caso no se llevan a cabo ensayos clínicos de sus posibles efectos.

A veces, como detallan desde el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (@ICIJorg), encargados de elaborar una base de datos con estos productos fallidos, en el 96% de los casos la única inspección que se lleva a cabo es tener en cuenta la información que aporta el fabricante de dicho dispositivo.

Cómo se puede reclamar si tengo un implante defectuoso

Si una persona está sufriendo importantes problemas de salud derivados de una prótesis o implante defectuoso, hay varias vías legales para poder reclamar esa negligencia sanitaria.

Eso sí, es importante saber que esa denuncia resulta más complicada cuando el fabricante de dicho dispositivo es extranjero. De ahí que muchos afectados recurran a la administración pública para que actúe a modo de denunciante contra ese fabricante. Algo que puede llevar un mejor recorrido en los tribunales que si es una persona particular la que demanda a una gran compañía.

Procesos judiciales que, en la mayoría de los casos, finalizan tras años de litigio con acuerdos confidenciales e importantes sumas de dinero que recibe el paciente afectado, con la obligatoriedad de no decir nada al respecto. Esto se hace para no "manchar" la imagen pública de dicha empresa. Además, junto al pago de esa cuantía, se dan los primeros pasos para que esos implantes defectuosos se retiren del mercado.