María Francés
Sociedad
¿Te gustaría poner papel pintado en tu cocina o tu baño? Ya existe, es impermeable y antihumedades
Descubre cómo son
Uno de los mejores recursos para decorar nuestras paredes de manera que no tengamos que pintar, bien porque es mucho trabajo o porque es más caro, es utilizando el papel pintado. Así podremos cambiar el estilo de nuestras paredes cuando nos cansemos, de una forma sencilla, rápida y más limpia.
El problema lo encontramos cuando aparecen humedades que traspasan el papel y lo estropean todo. Esto es muy común que ocurra en los baños y en las cocinas de las casas, lugares donde el agua, vapor o calor están siempre presentes.
Afortunadamente, existen vinilos de papel que han salido ya al mercado y están destinados a soportar temperaturas extremas. Estos papeles son resistentes a los golpes, manchas, humedad y la radiación ultravioleta, de manera que lo convierten en el papel más duradero.
La multinacional especializada en bricolaje, construcción y decoración, Leroy Merlín, tiene en su catálogo disponibles estos papeles que son adaptables a cualquier estancia. Ellos mismos los recomiendan especialmente para zonas con mucho tránsito y que sufren un alto desgaste como baños y cocina.
En Amazon también podemos encontrar otras ofertas de papel pintado que pueden resultarnos muy útiles para decorar las estancias de nuestra casa y muy sencillas de colocar en las paredes.
Con estos vinilos podemos darle un toque más moderno a las habitaciones, sin tener que entrar en reformas largas y caras, lo que supone una solución bastante eficaz y resolutiva. Además, su capa vinílica impermeable es fácilmente lavable con un paño o esponja húmeda sin dañar el papel, soportando una limpieza constante.
Funcionamiento
Para colocar el papel pintado es necesario aplicar sobre la pared la cola adhesiva específica en caso de que estos no vengan con adhesivos, para ir pegando el papel seco según se va empapando la pared con producto.
El papel tapiz se puede colocar directamente en la pared limpia, lisa o seca y en caso de que haya una burbuja, se puede pelar y volver a pegar o usar una aguja para perforar la burbuja.
Si las paredes son ásperas o están sucias, se recomienda limpiarlas hasta que se vaya la suciedad con trapos de papel húmedos o con papel de lija.