Irene Alcaraz
Sociedad
Me sudan mucho las manos: ¿cómo evitarlo?
La sudoración excesiva es una afección que se sufre en silencio, pero tiene tratamiento
El sudor de manos es tan frecuente como el de las axilas o pies, puesto que es donde se concentran la mayoría de glándulas sudoríparas. Sin embargo, algunas personas experimentan una sudoración excesiva o persistente que les dificulta desempeñar tareas cotidianas. Afortunadamente, existen varios tratamientos para reducir la sudoración.
Por qué sudamos
El sudor es una reacción corporal saludable, puesto que nos permite reducir la temperatura corporal cuando esta se eleva demasiado, ya sea debido al calor, al ejercicio, a la fiebre, etc. Lo que hace el cerebro es emitir una señal a las glándulas ecrinas, encargadas de producir el sudor que luego segregan los poros de la piel. De esta forma, la piel se refrigera y de paso se eliminan junto al agua los deshechos (como sales, azúcar, urea y amoniaco) que le otorgan ese mal olor.
Qué es la hiperhidrosis
La hiperhidrosis es una alteración por la cual esas glándulas ecrinas están constantemente activadas, como si el cerebro estuviera constantemente dando la orden de refrigerar, aun cuando la temperatura corporal es adecuada.
Estas glándulas se encuentran sobre todo en axilas, manos y pies, aunque también puede ocurrir en el cuero cabelludo y el rostro. Por esta razón, una sudoración excesiva puede llegar a ser problemática en el día a día: no poder llevar cierto calzado, humedecer constantemente la ropa, luchar contra las manos a la hora de escribir, agarrar papeles o manejar objetos delicados, como una cámara de fotos o un ordenador y un sinfín de situaciones que pueden derivar en una pérdida de confianza y malestar.
En algunos casos, la sudoración continua puede incluso propiciar la aparición de hongos y bacterias, además de dañar y enrojecer la piel.
Debido a que muchas veces se desconoce el concepto de hiperhidrosis, los pacientes no son conscientes de tener una afección médica, pese a que entre el 1 y el 4% de la población lo sufre.
Causas de la sudoración excesiva
No se conocen completamente las causas, pero se sabe que el patrón de sudoración cambia en el periodo de la adolescencia. Aunque se intuye que sea una herencia genética, también se atribuye como una consecuencia de un problema nervioso, ya que el sistema simpático (el que coordina las acciones no voluntarias, como la digestión) está enviando una señal errónea a las glándulas encargadas del sudor.
Tratamiento contra el sudor
No existe ningún hábito en el estilo de vida que sea capaz de aminorar o frenar la transpiración. Lo único que se puede hacer individualmente es evitar las situaciones que lo agravan, como usar ropa demasiado abrigada o apretada, tomar comida picante, etc. Por ello la mejor solución es acudir a un especialista.
El médico podrá proponer diferentes tratamientos para frenar la señal de las glándulas, como:
- Aplicación de cremas con cloruro de aluminio. Esta es una solución temporal e intermitente, ya que de aplicarla de forma continuada puede perjudicar la piel.
- Inyección de toxina botulínica que bloquee un químico que produce la transpiración.
- Iontoforesis. Este tratamiento consiste en aplicar unas corrientes eléctricas para obstruir el flujo de sudor hacia la capa externa de la piel.
- Cirugía. Llegado el caso, lo que hará el cirujano será obstruir el nervio que manda la señal de sudoración continuada junto a la zona afectada (axila, manos, pies...)