El omeprazol es un fármaco que evita la secreción ácida gástrica, y es uno de los medicamentos más usados para la prevención y tratamiento de diversas patologías como esofagitis por reflujo, úlcera péptica, úlcera duodenal, dispepsia, etc. De hecho, es el segundo principio activo más prescrito en España, después del paracetamol y por encima del ibuprofeno. Y según los datos de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), es uno de los medicamentos más vendidos y consumidos en nuestro país.
El omeprazol no es un protector de estómago como comúnmente se cree. Su uso tampoco es inocuo. El farmacéutico Javier Velasco, de la subcomisión de Revisión del Uso de los Medicamentos de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) explicaba hace un tiempo en una entrevista con Europa Press que siempre se ha confundido este medicamento con un protector de estómago porque "al reducir el ácido se está protegiendo el estómago, pero no se forma ninguna capa que proteja de otra manera al estómago", como la creencia popular ha instaurado.
Recientemente, Alicia Lázaro, miembro del Grupo de Trabajo de Hepatopatías Virales de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), también ha querido desmentir esta creencia: "En la población general el hecho de llamarlo así genera una utilización indiscriminada del medicamento, pasando a utilizarse 'si se va a comer o beber más de la cuenta o si me duele un poco el estómago, situaciones que nada tienen que ver con su indicación y que deben controlarse de otra forma. Esa consideración genera una falsa seguridad en su sobreutilización", explica en una entrevista a El Mundo.
El mismo medio ha hablado con Noelia Fontanillas, coordinadora del Grupo de Digestivo de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), quién también ha dado la voz de alarma: "El omeprazol ha pasado a formar parte de nuestros efectos personales, ingiriéndolo a menudo ante cualquier dolor gástrico o situación estresante de la vida cotidiana, ya que confiamos en su inocuidad cuando no es así".
¿Para qué sirve el omeprazol?
El omeprazol está indicado en casos de reflujo gastroesofágico, y en las en úlceras, tanto gástricas como duodenales. También en el tratamiento de una bacteria, la helicobacter pylori.
"También tiene indicación junto con fármacos gastroerosivos como antiinflamatorios no esteroideos (AINES) o anticoagulantes o antiagregantes cuando el paciente tiene patología digestiva esofágica, gástrica o en mayores de 60años", Fontanillas.
Un protector reducirá el ácido en el estómago, lo que ayudará a sanar el revestimiento del mismo para aliviar una gran variedad de afecciones. El Ministerio de Sanidad (@sanidadgob) ha aprobado el uso de omeprazol para las siguientes condiciones médicas:
Úlceras intestinales en adultos.
Úlceras estomacales en adultos.
Infecciones por Helicobacter pylori, en combinación con antibióticos.
Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) en personas de 1 año o más.
Esofagitis erosiva inducida por ERGE en personas de 1 año o más.
Mantener la curación de la esofagitis erosiva en personas de 1 año o más.
Síndrome de Zollinger-Ellison.
Sin embargo, los médicos no recomiendan el omeprazol para el alivio inmediato de la acidez estomacal porque puede tardar hasta 4 días antes de tener su efecto completo.
Cómo funciona
Las bombas de protones también se denominan bombas de hidrógeno-potasio y están ubicadas a lo largo del revestimiento interno del estómago. Estas bombas son responsables de liberar ácido en el estómago. Los inhibidores, como el omeprazol o el esomeprazol, bloquean la liberación de ácido, disminuyendo así la acidez dentro del estómago. El omeprazol tarda alrededor de 1 hora en bloquear la producción de ácido estomacal y su efecto máximo ocurre alrededor de 2 horas después de tomar la cápsula. La acción del omeprazol u otro protector puede continuar durante aproximadamente 3 días.
Cómo tomar protectores de estómago
Los médicos deben hacer un diagnóstico preciso antes de recetar omeprazol, ya que cada paciente requiere diferentes tratamientos. Los profesionales sugieren tomar el inhibidor de la bomba de protones de 30 a 60 minutos antes de la primera comida del día. Si el médico recomienda tomar omeprazol dos veces al día, la persona debe tomarlo antes del desayuno y antes de la cena.
Efectos secundarios
Entre los efectos secundarios de los inhibidores están:
Dolor de cabeza.
Dolor abdominal.
Náuseas.
Diarrea.
Vómitos.
Flatulencias.
Los efectos secundarios que los niños pueden informar son similares a los que informan los adultos, excepto que tienden a quejarse más de fiebre y problemas respiratorios, como faringitis e infecciones sinusales.
"El déficit de B12 lo vemos en algunos pacientes que toman omeprazol de forma continuada", asegura Fontanillas al medio.
Otro de sus síntomas puede ser el desarrollo de hipomagnesemia: "Se manifiesta como fatiga, tetania, delirio, convulsiones, arritmia ventricular, mareos... Esto es especialmente preocupante en pacientes que además toma otros medicamentos como dignoxina o diuréticos. En estos casos deberían medirse los niveles de magnesio de forma regular", explica Lázaro a El Mundo.
Y añade otro efecto que puede afectar a los mayores: "El riesgo de fractura de cadera, muñeca y columna vertebral, especialmente en pacientes de edad avanzada y con riesgo añadido de fracturas".
Además, hace poco la Agencia Española de Medicamentos y Sanitarios (AEMPS) ha publicado la ficha actualizada de este medicamento con un nuevo efecto secundario: “Se ha observado nefritis tubulointersticial (NTI) aguda, que puede aparecer en cualquier momento durante el tratamiento. La nefritis tubulointersticial aguda puede evolucionar a insuficiencia renal. El omeprazol debe suspenderse en caso de sospecha de NTI, iniciando el tratamiento adecuado”, explican en el informe.
Al parecer, el uso de este medicamento de medicamento debería controlarse en pacientes con infecciones intestinales o de enfermedad renal crónica, ya que puede provocar un mal funcionamiento de los riñones, que podría desembocar en una insuficiencia renal.
En caso de sospechar que se trata de NTI, la Agencia aconseja dejar de tomarlo. Esta nueva información se incorporará a los prospectos y fichas técnicas próximamente.
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.