Laura Moro
Sucesos
El triple parricida de Elche: cinco años de internamiento y tres de libertad vigilada
Si el joven fuera mayor de edad sería condenado a prisión permanente revisable

El asesinato de tres miembros de una misma familia a manos de su propio hijo en Elche ha conmocionado a España. El joven de 15 años que mató a sus padres y a su hermano de 10 años con una escopeta, confesó que lo hizo porque su madre lo castigó por sus malas notas.
Tras cometer el crimen, el adolescente pasó tres días encerrado en su habitación jugando a la videoconsola, y respondiendo a los mensajes que su madre recibía. Finalmente decidió confesarle lo ocurrido a una vecina.
Ahora, y después de que saliera a la luz la fría declaración del menor, que no mostraba signos de arrepentimiento, se ha conocido su posible condena: cinco años internado en régimen cerrado y tres años de libertad vigilada. Una pena que no está exenta de polémica.
Sin antecedentes para facilitar su reinserción

Sin embargo, para que esto pasara, el juzgado de menores tendría que condenarlo culpable, algo que todavía no ha sucedido, según la Información.es.
Y es que el joven está amparado por la Ley del Menor, ya que si hubiera cometido el crimen con 18 años, la pena sería prisión permanente revisable, pero al ser menor, esta condena no se contempla, y a los 21 años sería puesto en libertad, sin antecedentes penales.
Los antecedentes no se añadirían para facilitar la reinserción social del joven. De este modo, tras cinco años en régimen cerrado, el joven sería puesto en libertad a los 21 años, y sería vigilado durante otros tres años. Si durante este tiempo viviera con "normalidad", se le retirarían los antecedentes penales para facilitar su reinserción.