Cuidado con la nueva estafa de los 'números malditos' en WhatsApp

En los últimos meses, WhatsApp ha vuelto a situarse en el centro de las alertas de ciberseguridad. Esta vez, el motivo es tan llamativo como inquietante: como se conocen popularmente, los llamados 'números malditos' se tratan de una modalidad de estafa que utiliza esta aplicación de mensajería como puerta de entrada para el fraude y el robo de información personal.

Aunque la expresión pueda parecer salida de una leyenda urbana, la estafa de los 'números malditos' es muy común desde hace unos meses. En realidad, se trata de cuentas asociadas a prefijos internacionales inusuales que irrumpen de manera repentina en chats o grupos, intentando pasar desapercibidas entre los contactos habituales. Estos perfiles, según explican expertos en ciberseguridad, funcionan a menudo como nodos automatizados o bots que envían mensajes masivos con fines fraudulentos. Sus códigos más frecuentes son +62 (Indonesia), +685 (Samoa Occidental), +233 (Ghana) y +234 (Nigeria), aunque pueden variar con el tiempo o según el país objetivo.

El modus operandi de esta estafa

El primer mensaje suele ser inocente. Un simple “hola”, una oferta laboral o una propuesta de inversión pueden bastar para iniciar la conversación. A partir de ahí, los delincuentes construyen una interacción aparentemente normal, hasta que logran que la víctima haga clic en enlaces externos o entregue dinero como "garantía" para continuar el supuesto proceso. Una vez dentro del juego, el usuario puede llegar a proporcionar datos bancarios, contraseñas o instalar sin saberlo un software espía, lo que aumenta la vulnerabilidad de su dispositivo.

Otra de las tácticas más extendidas consiste en agregar usuarios sin su consentimiento a grupos desconocidos, donde los 'números malditos' difunden enlaces sospechosos y falsas oportunidades de empleo o inversión. Entre las más comunes están las que prometen ganancias diarias por acciones tan simples como dar “me gusta” a publicaciones en redes sociales. Cuando los afectados intentan abandonar el grupo o denunciar a los administradores, la mayoría de las veces el espacio desaparece y reaparece con otro nombre o con nuevos contactos, lo que dificulta su seguimiento y eliminación.

Muchos de estos incidentes se deben a que los usuarios mantienen configuraciones abiertas que permiten ser añadidos por cualquiera. Este pequeño detalle ofrece una vía libre para que los estafadores incorporen a potenciales víctimas sin necesidad de interacción previa. Por ello, los especialistas insisten en revisar los ajustes de privacidad de WhatsApp y limitar la opción de ser agregado a grupos solo a los contactos conocidos.

Algunas características de esta estafa

• Prefijo desconocido de países con los que no se tiene relación.

• Mensajes inesperados que ofrecen empleo, inversión o recompensas fáciles.

• Enlaces externos sospechosos o solicitudes de datos bancarios.

• Un patrón de conversación que, tras un inicio trivial, vira hacia propuestas económicas poco creíbles.

• Cuentas que aparecen dentro de grupos nuevos sin previo aviso.

Cómo actuar si escribe un 'número maldito'

1. No respondas: cualquier interacción puede dar lugar a más engaños.

2. Reporta el número a través de la función que ofrece WhatsApp para denunciar cuentas sospechosas.

3. Sal del grupo en el que aparezca ese número extraño.

4. Restringe quién puede agregarte a grupos: en Ajustes - Privacidad - Grupos, puedes limitar esta opción a “Mis contactos” o “Mis contactos, excepto…”.

5. Bloquea el número para evitar futuros intentos de contacto.

En definitiva, conviene mantener una actitud vigilante ante cualquier número desconocido que nos contacte por WhatsApp. Si el prefijo pertenece a un país que no reconoces, lo más prudente es actuar con cautela y evitar abrir enlaces o descargar archivos procedentes de estos remitentes. Los fraudes digitales evolucionan constantemente, incluso mediante el uso de inteligencia artificial para elaborar mensajes cada vez más convincentes. Por eso, confiar en la intuición sigue siendo una defensa esencial: cuando una oferta parece demasiado buena para ser cierta, debemos sospechar. Los llamados 'números malditos' son una amenaza real que exige prevención y desconfianza para resguardar nuestra seguridad digital.