Cómo emplear la sal de mesa para eliminar hormigas sin usar insecticidas y de forma rápida

Las hormigas suelen ingresar de manera muy fácil a las casas. Gracias a su pequeño tamaño, se pueden introducir por pequeñas fisuras en paredes, pisos o baldosas, y establecerse dentro de nuestra vivienda para protegerse del calor intenso. Aunque existen diversas formas de prevenir su ingreso, como tapar grietas y mantener la casa limpia, muchas veces resulta casi imposible evitar que estos pequeños insectos aparezcan en nuestra casa, especialmente durante el verano.

El principal motivo por el que un grupo de hormigas ingresa a una casa es la búsqueda de alimentos. Estos insectos poseen un gran sentido del olfato que les permite detectar rastros mínimos de azúcar, grasa o migajas de pan. Es por eso por lo que siempre terminan dentro de la cocina, ya que un envase mal cerrado las puede atraer fácilmente. No debemos nunca subestimar la inteligencia de las hormigas, que están entre las más evolucionadas socialmente dentro del reino animal.

Su importancia ecológica

Aunque en muchas ocasiones pueden resultar muy molestas o causar picaduras o alergias, las hormigas juegan un papel crucial en el equilibrio del medio ambiente. Su presencia no está relacionada con la falta de higiene, sino que su función principal es descomponer materia orgánica. Además, contribuyen a mejorar la estructura del suelo al favorecer su aireación y participan de manera activa en el control de otros insectos como larvas o parásitos.

Es por eso que, siempre que sea posible, lo ideal es evitar eliminarlas con insecticidas químicos o cebos industriales. La mejor opción es emplear métodos naturales que impidan su entrada en la casa.

Cómo usar la sal para evitar la presencia de hormigas

La sal común de mesa es una de las formas más sencillas para mantener a estos insectos fuera de tu casa sin dañarlas y respetando el ecosistema. Las hormigas buscan evitar las superficies cubiertas de sal porque el contacto directo con ellas provoca su deshidratación. Es por eso que se recomienda esparcir sal en lugares estratégicos como ventanas, marcos de puertas, esquinas del piso y grietas, creando una barrera que dificulte su ingreso.

Otras formas naturales para eliminar hormigas

Existen diferentes remedios caseros para eliminar las hormigas que se instalen en tu despensa u otras áreas del hogar. Algunas de las más recomendadas son:

• Polvo de talco o tiza: funcionan como barreras secas cuando se espolvorean en los marcos de puertas y ventanas.
   
• Vinagre blanco o jugo de limón: sus intensos aromas resultan desagradables para las hormigas y además deshacen las señales químicas de feromonas que utilizan para marcar el camino.
   
• Canela: al igual que la sal, se puede esparcir en los puntos donde suelen aparecer las hormigas para mantenerlas lejos
   
• Aceites esenciales: unas gotas diluidas en agua para limpiar pisos o pasar el trapeador pueden ser muy efectivas, además de dejar un aroma agradable en el ambiente.