¿El caramelo líquido se endurece a los pocos minutos? ¿El punto de nieve de las claras para ti es un enigma? ¿El bizcocho se desmorona al cortarlo? Estas son situaciones frecuentes que pueden hacer que te desanimes a la hora de preparar un rico postre o un pastel para la merienda, pero que muchas veces ocurren por caer en errores simples de fácil solución.
La repostería es una bonita afición que puede darte muchas satisfacciones. Tomar algo dulce, siempre con moderación, es un placer y aprender a hacer tus propios pasteles, sabiendo que vas a utilizar ingredientes naturales y sanos como la leche, los huevos o la harina, es una buena idea. Se trata de una actividad entretenida y divertida que, además, puedes compartir con quien quieras, especialmente con tus nietos.
Sin embargo, la pastelería no es fácil, así que si te animas, empieza preparando las recetas más sencillas, como unas galletas o un bizcocho. Cuando veas que te salen bien, te animarás a avanzar para conseguir postres más elaborados. En este sentido, recuerda estos tres consejos para principiantes a la hora de iniciarte en el mundo de la respostería:
Así, tanto si ya tienes tablas en esto de sorprender con deliciosos postres, como si das tus primeros pasos en la pastelería, estos cinco trucos, que vas a necesitar en más de una ocasión, te resultarán de lo más prácticos.
Hay mil recetas para hacerlos y son muchos los posibles acabados: con aroma a cítricos, con frutos secos, de chocolate o rellenos con cremas o mermeladas. En cualquier caso, lo esencial es que el bizcocho en sí mismo resulte suave y esponjoso y para lograrlo el secreto es el siguiente.
Las vas a necesitar en múltiples ocasiones, por ejemplo como base para hacer un rico y suave merengue, que podrás incorporar a numerosas recetas. Para lograr el famoso punto de nieve, los pasos a seguir son:
Es otro de los ingredientes estrella de numerosos postres, entre ellos, los sencillos flanes. Hacer el caramelo no tiene dificultad, pero sí más de un pequeño truco.
Esencial para lograr un acabado perfecto en un sinfín de tartas. Para que te quede bien y conseguir que tus pasteles resulten irresistibles prueba a hacer la cobertura de la siguiente manera.
Puedes rellenar tus tartas o bizcochos de lo que te apetezca, como mermeladas, crema pastelera, chocolate, merengue oqueso de untar . Pero para hacerlo tendrás que realizar los cortes necesarios para crear distintas capas, algo que parece muy sencillo, pero que también tiene su truco.
Para lograr que queden perfectos, haz los cortes siempre con la tarta fría. Lo ideal es realizarlos con una segueta especial para estos menesteres, pero si no la tienes, con un hilo y algo de maña lograrás un corte impecable. Simplemente rodea con un hilo resistente el pastel y tira de ambos extremos para que atraviese la tarta. Con un cuchillo es más complicado obtener secciones uniformes y totalmente limpias, sin migas. Una vez separados los pisos que quieras, procede al relleno y ve superponiéndolos. Ya tienes una creativa tarta a capas.