Cerlesky Pérez
Economía familiar
¿Derecho a indemnización por un incendio forestal? Esto es lo que debes saber
Las ayudas públicas solo aplican si se declara zona gravemente afectada

Incendios forestales: ecologistas exigen medidas "contundentes" contra las causas que los originan
Con la llegada del verano, los incendios forestales vuelven a causar estragos en distintas zonas del país, afectando ya a a más de 115.000 hectáreas en lo que va de mes de agosto. En este contexto, conocer qué hacer tras un siniestro puede marcar la diferencia a la hora de reclamar daños y acceder a compensaciones.
Si se dispone de una póliza con cobertura contra incendios, ya sea para una vivienda, un vehículo o una finca, los daños sufridos estarán contemplados. Es importante notificar el siniestro a la aseguradora lo antes posible (generalmente en un plazo de siete días, salvo que se indique otro en el contrato). También conviene documentar los daños con fotografías y conservar lo que sea posible para facilitar la labor del perito.
Cuando el origen del incendio es natural, como la caída de un rayo, no hay un responsable al que reclamar, pero el seguro contratado servirá como vía para solicitar indemnización. Si el incendio fue provocado y se identifica al autor, se podrá reclamar directamente a esa persona o a su aseguradora de responsabilidad civil. En ausencia de un responsable solvente, las víctimas podrían acogerse a ayudas públicas si se declara la zona como afectada por una emergencia de protección civil.

Diferencias entre el seguro del hogar y el seguro comunitario
El seguro de comunidad se encarga de los daños estructurales del edificio y las zonas comunes. En cambio, el mobiliario y los objetos personales están cubiertos por el seguro individual de cada vecino. Algunas pólizas también contemplan los gastos de intervención de bomberos o inhabitabilidad temporal.
En caso de que el fuego provoque daños en propiedades vecinas, será la cobertura de responsabilidad civil la encargada de asumir esos costes.
Viviendas con hipotecas
Las viviendas hipotecadas están obligadas por ley a contar con, al menos, un seguro que cubra incendios. Si la propiedad se destruye, la deuda con el banco se mantiene, pero el seguro puede cubrir el daño estructural. En situaciones de conflicto, la compañía puede depositar el importe de la indemnización en el juzgado.

Para entornos rurales, la entidad "Agrupación Española de las Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados, S.A.", Agroseguro, S.A. gestiona seguros agrarios combinados que cubren los daños causados por incendios, heladas, pedrisco y otros riesgos naturales sobre cultivos, ganado o zonas forestales, así como los costes de regeneración de masas forestales dañadas.
No obstante, debe consultarse para cada caso las condiciones de cobertura.
Cómo proceder a una reclamación
Las personas afectadas tienen derecho a reclamar indemnización por daños personales o materiales según el Código Civil. Si cuentan con seguro de hogar, este cubrirá lo estipulado en su contrato, incluyendo daños a la estructura, contenido, alojamiento provisional y otros gastos relacionados.
Cuando existe un responsable identificado, el perjudicado puede dirigir su reclamación directamente a la aseguradora del causante, siempre dentro de los límites de la póliza. También aplicaría en el caso de seguros de vida o accidentes vigentes.

Por otro lado, El Consorcio de Compensación de Seguros no cubre los daños causados por incendios, ya que no se consideran un riesgo extraordinario. A diferencia de otros fenómenos como terremotos, inundaciones o erupciones volcánicas, los incendios no permiten reclamar indemnización a este organismo en caso de no contar con un seguro privado.
No obstante, sí contempla indemnizaciones cuando resultan heridas o fallecen personas que participan en las tareas de extinción, tal y como recoge en el artículo 49 de la Ley de Montes.
Exclusiones habituales en las pólizas contra incendios
Las pólizas no suelen cubrir objetos de valor como joyas, obras de arte o dinero en efectivo, salvo que estén expresamente incluidos. Además, si el incendio fue provocado intencionadamente por el propio asegurado, la compañía aseguradora no cubrirá los daños.
Ante cualquier siniestro, revisar con detalle las coberturas contratadas y actuar con celeridad es fundamental para iniciar el proceso de reclamación y mitigar las consecuencias del fuego.