Pensiones

Los pensionistas salen a la calle por la subida con el IPC real: "La jubilación no es un regalo"

Pablo Recio

Sábado 15 de octubre de 2022

ACTUALIZADO : Sábado 15 de octubre de 2022 a las 18:37 H

9 minutos

Se oponen también al "falso conflicto generacional" y piden el aumento de los sueldos

Los pensionistas salen a la calle por la subida con el IPC real: "La jubilación no es un regalo"
Pablo Recio

Sábado 15 de octubre de 2022

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ACTUALIZADO

El movimiento de pensionistas se ha manifestado este sábado 15 de octubre por las calles de Madrid a favor de la subida de todas las pensiones según "el IPC real –no el medio–" y de las mínimas al 60% del salario medio –unos 15.000 euros brutos–.

Además, los pensionistas reclaman al Gobierno acabar con la brecha de género, una auditoría de la Seguridad Social, que los y las viudas cobren el 100% de la prestación, la no penalización de las largas carreras de cotización y una subida de los sueldos acorde con la inflación actual, entre otras medidas. 

La marcha, que ha sido convocada por organizaciones como la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones (@CoespeOficial), el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria, el Movimiento Andaluz en Defensa de las Pensiones Públicas (@MOANDPP), el Movemento Galego en Defensa das Pensións e os Servizos Públicos, UNIDAD COESPE (@UCoespe), ASJUBI40 (@asjubi40) y las plataformas de Badajoz y Móstoles –cuenta asimismo con el apoyo de la Unión Democrática de Jubilados y Pensionistas (@MayoresUDP)–, ha recorrido el centro de la capital a partir de las 12 h. desde la Plaza de Neptuno hasta Callao. 

 

La inflación afecta a los pensionistas

Este sábado los manifestantes han escenificado la entrega de miles de firmas por la revalorización de las pensiones y salarios según el IPC acumulado anual, por una pensión mínima del 60% del sueldo medio, por el rechazo a la privatización del sistema público y por la eliminación de la brecha de género. 

"La causa fundamental de la inflación no son los salarios ni las pensiones, se debe sobre todo a la acción del empresariado, que ha aprovechado la crisis y la guerra para incrementar sus beneficios. Las consecuencias de esta política desenfrenada es la disminución del poder de compra de las familias obreras", lamenta el portavoz de Coordinadora de Madrid por la Defensa del Sistema Público de Pensiones, integrada en COESPE (@Coorpenmadrid), Juan Miguel Fernández.

Por esta razón, argumenta, es importante que se garantice una mayor subida de las pensiones. "Es un despropósito hablar de las promesas de un Gobierno –el Ejecutivo aseguró que aumentarían cerca de un 8,5% en 2023– que incumple la Ley respecto a la auditoría de la Seguridad Social y que además anuncia que seguirá haciéndolo mediante la disminución de la actual tasa de reemplazo, con su propuesta de rebajar el importe de las pensiones, aumentando de 25 a 35 años el periodo de cálculo de las bases. Las promesas, días antes de la gran manifestación de pensionistas y trabajadores de toda España del 15 de octubre, son, sólo eso, promesas. Para valorar si ayudan a mantener el poder adquisitivo de las pensiones y los salarios de los trabajadores activos esperaremos a su aprobación oficial", indica.

"La subida anunciada no se puede valorar aislada de lo que ha sucedido con nuestras pensiones en 2021 y 2022, la aplicación del nuevo método de revalorización en función del IPC Medio ha ocasionado, en comparación con el IPC general y el criterio de revalorización de las pensiones vigente hasta la reforma de 2011, una pérdida de poder adquisitivo del 3% en el 2021 y mucho nos tememos que en 2022 no será inferior al 6%", apunta el portavoz del Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria, Txomin Lorca. 

"Esta pérdida del poder adquisitivo no se recupera con el 8,5% anunciado para Enero de 2023, veremos cuál será el resultado; pero lo que si no evitamos no se va a recuperar es lo que hemos perdido desde la entrada en vigor de la Ley 21/2021 al eliminarse la paga compensatoria –paguilla–. Conclusión: en función del IPC general y de la pérdida de poder adquisitivo en 2021 y 2022 la decisión del Gobierno de subir las pensiones un 8,5% es injusto e insuficiente", añaden.

 

Un choque generacional interesado

Por otra parte, el portavoz de Coorpenmadrid - COESPE entiende que el llamado conflicto generacional entre trabajadores precarios y pensionistas no es real.

"El plan de Escrivá se centra en la sustitución de las pensiones públicas por privadas de un sistema complementario en manos de los bancos. Para justificar ese recorte necesita proclamar que el sistema actual no es sostenible, por eso no quiere que una auditoría demuestre lo contrario. Y además, ante la firmeza de la resistencia de los pensionistas, que han obtenido un amplio apoyo de asociaciones, sindicalistas, organizaciones democráticas etc., se intenta enfrentar a los diferentes sectores que nos apoyan. Confrontar a jubilados contra jóvenes es lo que hace Escrivá subiendo la edad en vez de liberar puestos de trabajo. Esto tiene poco recorrido pues todos compartimos que las pensiones dependen de los aumentos de salarios. Sólo con unos sueldos dignos se generan cotizaciones y pensiones dignas. La solidaridad intergeneracional para nosotros consiste en que los jubilados futuros, actuales activos y jóvenes, cobren lo mismo que los actuales. Esa es nuestra lucha, que no se reduzcan las pensiones en beneficio de los planes privados", asegura. 

"Los datos que se utilizan para pretender justificar esa confrontación son poco profesionales; parece que todo vale. Se comparan salarios mínimos con pensiones medias, núcleos de población escogidos aleatoriamente sin considerar las medias estadísticas... Son datos útiles para hacer titulares populistas y sin base económica consistente. El reparto equitativo de la riqueza en forma de pensiones, salarios y salario social nos compete a todas las personas, a la mayoría abrumadora de la sociedad sin distinción de edad ni de sexo o procedencia; no queremos disputar la miseria que 'generosamente' nos donan los ricos, queremos devolver a quienes producimos con nuestro trabajo la riqueza los beneficios que injustamente acumulan unas pocas personas tras apropiarse de ella", explica desde el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria, Txomin Lorca. 

 

"No tenemos la culpa de los sueldos de miseria de los jóvenes"

Coincide con los postulados del Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria el representante de ASJUBI40, Santiago Menchero.

“Pedimos que a los trabajadores se les suba el IPC real y que se acaben los sueldos de miseria que pagan a los jóvenes. Eso sí, los pensionistas no tenemos culpa de eso. Nosotros hemos cotizado toda nuestra vida y, en función de esa aportación, nos ha quedado una cuantía. No es un regalo. Si los diferentes gobiernos no han sabido administrar la hucha y se lo han estado gastando en otras cuestiones, es problema de ellos”, denuncia.

"La inflación afecta muchísimo al pensionista medio, porque normalmente no podemos generar ingresos de ningún tipo, no estamos en una empresa en la que poder negociar que se nos suba el sueldo o no. Y no podemos buscar un trabajo, porque no hay. De hecho, muchas personas se quedan sin empleo a los 50 y tantos años, porque se considera que ya son mayores. Por ello, tengo que decir que las subidas del Gobierno, aunque se está haciendo más que antes, no son suficientes”, opina.

Y es que, comenta Menchero, el Ejecutivo no termina de cumplir con las peticiones del colectivo ni siquiera a un año de las elecciones. “Lo que tiene que hacer el Gobierno es no hacer caso a la CEOE. Deben pensar que la gente les ha votado para que solucionen los problemas diarios y, entre ellos, están las pensiones y los sueldos”, razona. 

Es más, ejemplifica, aunque algunas de "nuestras peticiones" se están aplicando en cierto modo, otras, "como la eliminación de los coeficientes reductores a las largas carreras de cotización", siguen siendo ignoradas.

Sobre el autor:

Pablo Recio

Pablo Recio

Pablo Recio es periodista especializado en salud y dependencia, es graduado en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid y comenzó su carrera profesional en el diario El Mundo cubriendo información cultural y económica. 

En 65Ymás, ha contado el drama vivido en las residencias durante la pandemia y ha sacado diferentes exclusivas de impacto como 81 menús de residencias de mayores, a examen: "Baja calidad nutricional y abuso de procesados"que fue citado en una comisión de investigación en la Asamblea de Madrid. 

Además, fue cofundador de la radio online Irradiando y cuenta con un máster en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid y otro en Periodismo por el CEU San Pablo/Unidad Editorial. 

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