Toni Esteve
Pensiones
Ventajas de aportar al plan de pensiones y al de empleo de la empresa al mismo tiempo
La cantidad límite para desgravar no aumenta, aunque hagamos distintas aportaciones
Los planes de pensiones son un producto de ahorro para la jubilación con importantes ventajas fiscales. Por este motivo están entre los más populares a la hora de generar un dinero adicional y complementario a la pensión pública de la Seguridad Social. La compatibilidad entre planes de pensiones y otros productos de ahorro no tiene restricciones, además, también se permite invertir en más de un plan de pensiones.
Tener dos o más de estos instrumentos de ahorro contratados tiene la clara ventaja de la diversificación. Eso si, dependerá de cada caso y del perfil correspondiente, escoger la opción más adecuada. Así que, para el momento de la jubilación se puede contar con más de un plan de pensiones.
Una opción es la de compaginar un plan de pensión individual con un plan de pensiones de empleo (PPE). Con esta combinación se reciben aportaciones tanto personales como de la empresa en la que se trabaja, por lo que puede resultar una alternativa especialmente ventajosa. Los planes de pensiones de empleo constituyen una fórmula de ahorro privada y voluntaria y en ningún caso sustituyen a las pensiones públicas. Los PPE se enmarcan dentro del ámbito de la empresa: el promotor del plan es el empresario y los partícipes serán los empleados, que podrán adherirse al mismo siempre que acrediten las condiciones necesarias.
Cómo afecta a la declaración del IRPF
Las aportaciones a los planes de empleo son por lo general realizadas por parte de la empresa (lo contrata esta para el beneficio de sus empleados). Sin embargo, los empleados también pueden hacer aportaciones voluntarias al plan de empleo, aunque la cantidad límite que el trabajador podrá desgravarse en la declaración de la renta continuará siendo de 8.000 euros anuales. Este tope anual también incluye las aportaciones que el trabajador haga a su propio plan de pensiones individual, si es que lo tiene. Por lo que no podrá descontarse de la base imponible del IRPF las aportaciones que excedan ese límite.
Los planes de pensiones individuales son traspasables a un plan de empleo, tanto en condición de partícipe como en condición de beneficiario, aunque debemos siempre consultar antes las condiciones particulares que tuviéramos estipuladas.
Ambos planes tienen el mismo tratamiento fiscal, como hemos visto. No obstante, pagan diferentes comisiones. Así, una de las ventajas de aportar al Plan de pensiones colectivo frente a uno individual es que pagas menos comisiones, ya que se entiende que los PPE son un beneficio social promovido por la empresa sin necesidad de realizar una labor comercial. Y claro, si pagamos menos comisiones, la rentabilidad de nuestra inversión en este productos será más alta.