Es típico de la región murciana de Lorca, como su nombre bien indica. Este potaje es muy sabroso y diferente a los demás. En primer lugar, porque se elabora con acelgas en lugar de espinacas; en segundo lugar, porque no es vegetariano, puesto que incorpora chorizo; pero sobre todo este potaje lorquino es diferente gracias a un majado de ajo, limón y piñones que lo hace aromático y riquísimo.
El potaje lorquino se puede adaptar a la cuaresma, ahora en Semana Santa, con tan solo retirar el chorizo. Pese a la ausencia de carne, resultará muy sabroso. Te damos las dos opciones, y ¡tú eliges!
Ingredientes:
300 gr. de garbanzos
4 chorizos pequeños
1 manojo de acelgas
1 cebolla
2 tomates maduros
2 patatas medianas
4 dientes de ajo
2 ramas de perejil
40 gr. de piñones
Medio limón
Sal
Aceite de oliva
Elaboración:
Para hacer este potaje lorquino, la víspera, debemos poner los garbanzos a remojo en abundante agua con un poco de sal. Al menos, deberán pasar la noche entera a remojo, aunque lo ideal son 12 horas.
Ya al día siguiente, ponemos en una olla amplia los garbanzos remojados al fuego con abundante agua. Al principio los ponemos a máxima potencia y cuando el agua rompa a hervir bajamos el fuego.
Vamos preprando las verduras. Lavamos las acelgas y las partimos en trozos. Pelamos y chascamos las patatas. Chascar las patatas no es más que partirlas en trozos, pero rompiéndolas y no cortándolas con el cuchillo, para que así desprendan su almidón de forma natural, y esto ayudará a espesar el guiso. La mejor manera de hacerlo es sujetar la patata con una mano y con la otra, ir haciendo incisiones con el cuchillo, pero a medio corte, levantar un poco el cuchillo para que se rompa.
Aparte, pelamos la cebolla y la picamos en brunoise fina, es decir, en daditos bien pequeños. Por otro lado, lavamos los tomates y los picamos también en daditos.
Pasada media hora de cocción, añadimos las acelgas y las patatas. Seguimos cocinando.
Acercamos una sartén al fuego con un hilio de aceite de oliva y sofreímos la cebolla picada, a fuego suave para que se poche despacio. Cuando la cebolla comience a ablandarse y transparentar, incorporamos el tomate y los chorizos partidos en rodajas. Cocinamos durante siete o diez minutos más.
Apartamos el sofrito del fuego y lo añadimos a la olla con los garbanzos. Ponemos a punto de sal.
Ponemos en el mortero, o en el vaso de la batidora, los dientes de ajo pelados y partidos en cuatro trozos, el manojo de perejil, desechando los tallos y el medio limón pelado. Trituramos bien.
Añadimos este majado a la olla del potaje y seguimos cocinado hasta que los garbanzos estén bien tiernos. Al final, probamos y rectificamos de sal si fuera necesario.
Dejamos reposar cuatro o cinco minutos y servimos inmediatamente.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.