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Rafuel, influencer de cocina: "Los sénior no tenemos nada de postureo en redes, somos auténticos"
El chef de los "huevos con jamón" reivindica usar la tecnología para conectar con hijos y nietos
El chef amateur Rafael Antonín (@Rafuel55) es quizás uno de los influencer sénior más reputados en España. Desde sus primeros pasos en las redes allá por 2010 cuando empezó a colgar sus primeras recetas para atraer la atención de sus hijas a la mesa, se ha consolidado como una de las figuras gastronómicas más importantes de España, situándose entre uno de los diez influencers más relevantes del país. A sus 70 años, suma entre sus cuentas de Instagram y TikTok más de un millón de seguidores desde donde predica una cocina "de mercado", "sencilla", pero "cuidada", con platos estrella como su emblemática tortilla de patatas, o sus huevos con patatas y jamón, que considera "el caviar del Mediterráneo".
A pesar de su éxito digital y en los negocios tras la reciente apertura de un restaurante en Barcelona, Casa Rafael, Rafuel nos cuenta en esta entrevista en 65YMÁS que su receta del éxito radica en la constancia y el servicio a su audiencia. "El secreto del éxito es constancia. No es ser el más bueno, sino el más constante y quien más interactúa con su comunidad", nos cuenta, destacando además que los influencer de su generación "no tenemos nada de postureo". Porque las etiquetas que más usa Rafuel, no son ni #healthy ni #fit, sino #iberico o #tortilla. Un gran comunicador, cuya vida ha estado dedicada a la venta de combustible (de ahí el apodo), pero que ha demostrado su capacidad de reinventarse con los años. "Ahora veo que las redes son una manera no solo de conectar con la generación de mis hijas, sino con mis nietos. Hay que seguir creciendo y no quedarse parado", reivindica.
PREGUNTA: Estás entre los diez influencer gastronómicos más importantes de España. ¿Cuál dirías que es tu secreto del éxito?
RESPUESTA: Sabes, el secreto del éxito es la constancia. No es ser el más bueno, sino el más constante. Y tener mucha atención a no solamente a lo que pones, sino lo que contestas y cuidar a la comunidad que estás haciendo.
P.- Todos tus platos al final se han hecho famosos, porque son accesibles para mucha gente...
R.- Yo lo que hice fue hacer las recetas de casa con instrumentos de casa y con productos de mercado, con recetas fáciles para que la gente que me viese y le gustase. No es lo que me gusta a mí, sino lo que te gusta a ti, porque eso es lo que triunfará. Y, ¿cómo lo sé? Pues contestando y hablando con la comunidad, cuidándola. Al final es la comunidad la que te hará crecer, pero has de cuidar a la comunidad, porque si cada día marchan diez y haces 12, pues al final hay algo que no funciona.
P.- Y vamos a tus orígenes como influencer de cocina ¿Qué le llevó a un vendedor de fuego de combustible a convertirse, a lanzarse a este mundo?
R.- Pues sobre todo, no perder el contacto con la gente joven. Porque cuando tú estás en casa y dices, 'A cenar, te oyen, pero no te escuchan, ¿vale? Y no te hacen ni caso. Entonces yo subí a Facebook en 2008 o 2009 una foto de mi plato y los compañeros de mis hijas del instituto le dijeron, "Si no vais vosotras a comerlo, iremos nosotros'. Ahí es cuando me di cuenta de que el buzoneo se había acabado y empezaba una nueva era de publicidad. Ya incluso la página web se ha quedado obsoleta. La ventana de tu empresa tiene que ser la red social y a través de aquí vender si quieres.
P.- ¿Cómo creas las recetas que luego subes?
R.- De acuerdo con el tiempo, el día de la semana, el día del mes, vamos a hacer una valoración en lugar de si es lunes, o viernes, cuando el cuerpo quiere más fiesta. El tiempo, productos de temporada son muy importantes también, para poner un gazpacho o una sopa de verduras, por ejemplo.. Porque vas haciendo más económicas o menos económicas, de acuerdo con el día que toque.
P.- Antes hablabas de que se ha perdido un poco esa cocina tradicional de casa, de la madre, de la abuela. ¿Qué influencia tiene tu madre en todo esto de la cocina?
R.- Pues toda. Éramos una casa de nueve hermanos comíamos de aprovechamiento. Mi madre ponía unas albóndigas, aceitunas, no sé qué.. Pero al final, ¿qué tenía que hacer? Llenar la barriga de nueve hijos. Luego me me formado, por ejemplo en la escuela de Hoffman, porque me gusta saber el por qué de las cosas y además entre un curso de Excell y uno de cocina, me gustaba más esto.
P.- Tu nombre, Rafuel, viene de toda una vida dedicada a la venta de combustible. ¿Fue quizás cuando te jubilaste de ese mundo cuando te metiste en la cocina?
R.- Yo sigo en el mundo del petróleo no me he jubilado de esto. Pero la cosa viene porque siempre comíamos fuera de cada con los clientes y un buen día nos quitaron las dietas y entonces yo me los traía a comer a casa. Siempre he ido haciendo cosas de estas.
P.- ¿Por eso abriste un restaurante en Barcelona?
R.- Fue una casualidad porque el local era de unos petroleros amigos míos, que me dejaron hacer y ahí estoy. De verdad que yo no tuve intención de montar nada, pero bueno, al final, nos liamos, puse Casa Rafuel subí mis recetas, me vino a ver gente y ha pasado esto.
P.- ¿Cómo ve Rafael el mundo a sus 70 años?
R.- Lo sigo viendo igual, ya te digo que muchas veces no te das cuenta de que el cuerpo ya no te da. Si por mí fuese ... por ejemplo me gustaría abrir un restaurante en Sevilla, e ir a hí varios días al mes, pero no sé yo si el cuerpo me aguantaría porque me gusta la Sevilla la juega...
P.- ¿Cómo crees que ejemplos como el tuyo puede servir para romper estereotipos relacionados con la edad?
R.- Las redes por ejemplo, pueden ser una conexión con la gente joven. Si quieres estar conectado con tus nietos, tienes que estar lo más cercano a las nuevas tecnologías y a lo que están utilizando ellos. Lo que no puede ser es que el día de mañana, dentro de 30 años, mis nietos se imaginen al abuelo sentado en un sofá leyendo un periódico de papel y sin hace nada...
P.- No sé si nos puedes decir algún otro influecer sénior que tú sigas
R.- Ahora vengo Arahy que tiene restaurante en Madrid y trabaja muy bien en atún. Es un gran influencer y a mí me parece de los de los buenos de verdad que tenéis aquí en Madrid, con un índice de popularidad de 200.000 seguidores. Te quedas de piedra lo bien que lo hacen. Hay mucha gente que lo está haciendo bien. Luego también está Joaquín Monge, que cocina... Es ingeniero, con una clase admirable. Yo cuando vengo a Madrid y me sobre medio día, voy con él.
P.- ¿Qué crees que tenéis en común los influencer sénior?
R.- Pues nosotros yo creo que de postureo no tenemos nada. Hacemos cocina de casa y nos salimos de todas estas sofisticaciones. Ahora están poniendo caviar a la carne... La verdad es que no. El caviar se come en casa y no en el restaurante para que te vean.
P.- ¿Cuál es para tí la receta perfecta?
R.- Para mí es la que siempre digo: patatas fritas, huevos fritos y jamón ibérico. Y este es el caviar del Mediterráneo.
