Cuídate +

10 razones por las que te puede doler la parte superior de la espalda y el pecho

Patricia Matey

Foto: Bigstock

Sábado 13 de diciembre de 2025

10 minutos

Las causas pueden estar relacionadas con el corazón, el tracto digestivo y otras partes del cuerpo

10 razones por las que te puede doler la parte superior de la espalda y el pecho (Bigstock)
Patricia Matey

Foto: Bigstock

Sábado 13 de diciembre de 2025

10 minutos

Este es el tipo de actividad física que mejora la osteoartritis de rodilla

Cuando el corazón te avisa, no es traidor

 

Son varias las afecciones que pueden causar dolor en el pecho y la parte superior de la espalda simultáneamente. Las causas pueden estar relacionadas con el corazón, el tracto digestivo y otras partes del cuerpo. Y aunque algunas veces los motivos que provocan estas molestias no son una emergencia, otras sí. Por eso y como, documenta Healthline, es importante buscar atención médica de urgencia si se presenta dolor en el pecho repentino o inexplicable que dura más de unos minutos, dificultad para respirar o si te sientes sudoroso o pegajoso (diaforesis).

Las posibles causas del dolor en la parte superior de la espalda y el pecho incluyen:

1. Ataque cardíaco

Un infarto se produce cuando se bloquea el suministro de sangre a los músculos del corazón. Debido a esto, las personas que lo padecen pueden experimentar dolor en el pecho que puede extenderse al cuello, los hombros y la espalda. Otros síntomas a los que debe prestar atención incluyen:

  • Sensación de presión u opresión en el pecho.
  • Sudoración fría.
  • Dificultad para respirar.
  • Sensación de mareo o desmayo.
  • Náuseas.

Según la Asociación Americana del Corazón, las mujeres son más propensas que los hombres a experimentar dolor de infarto en la espalda o la mandíbula. También es importante tener en cuenta que algunas personas que sufren un infarto pueden experimentar muy pocos síntomas o ninguno.

La institución también recuerda que la edad promedio de una persona que sufre su primer infarto es de 65.5 años para los hombres y 72 años para las mujeres. Es menos común entre las personas más jóvenes, pero si experimentas síntomas, es importante buscar ayuda médica inmediata.

2. Angina

La angina es un dolor que se produce cuando el tejido cardíaco no recibe suficiente sangre. Puede ocurrir comúnmente en personas con enfermedad de las arterias coronarias. Se produce de forma habitual al realizar un esfuerzo. Similar al dolor de un infarto, el de angina puede extenderse a los hombros, la espalda y el cuello. Los síntomas pueden variar entre hombres y mujeres. Ellas pueden sentir dolor en la espalda, el cuello o el abdomen, además del dolor en el pecho o en lugar de él. Otros síntomas son:

  • Fatiga o debilidad.
  • Dificultad para respirar.
  • Sudoración.
  • Sensación de mareo o desmayo.
  • Náuseas.

3. Acidez estomacal

Se produce cuando el ácido o el contenido del estómago regresa al esófago. Esto causa una sensación de ardor y dolor en el pecho, detrás del esternón. A veces, también puede sentirse en la espalda o el abdomen. La acidez estomacal tiende a empeorar después de comer o por la noche. También puedes notar un sabor ácido en la boca o dolor que empeora al acostarte o agacharte. Un 47% de la población española asegura sufrir acidez y un 44% re­flujo gastroesofágico.

El embarazo, el sobrepeso o la obesidad también pueden aumentar el riesgo de desarrollar acidez estomacal. Algunos alimentos también pueden desencadenar esta afección, como las comidas picantes, los cítricos y los alimentos demasiado grasos. 

4. Pleuresía

La pleuresía se produce cuando las membranas que recubren los pulmones y la cavidad torácica se inflaman. Normalmente, estas membranas se mueven suavemente unas sobre otras. Cuando se inflaman, pueden rozarse entre sí, lo que provoca dolor. La pleuresía puede ser causada por diversas causas, como infecciones, enfermedades autoinmunes y cáncer. El dolor de la pleuresía empeora al respirar profundamente o toser. También puede extenderse a los hombros y la espalda. Otros signos incluye: 

  • Tos.
  • Dificultad para respirar.
  • Fiebre.
  • Escalofríos.
  • Pérdida de peso inexplicable.

5. Problemas de columna

En algunos casos, un nervio pinzado en la parte superior de la columna puede causar que el dolor se irradie al pecho y posiblemente a las extremidades. Además del dolor, otros síntomas que puede experimentar incluyen espasmos musculares y rigidez en la zona afectada de la columna, lo que puede restringir el movimiento.

 

Un sénior hablando con su médico sobre los problemas de dolor de espalda. (BIgstock)

6. Cálculos biliares

La vesícula biliar es un órgano pequeño que almacena un líquido digestivo llamado bilis. Los cálculos biliares se forman cuando este líquido se endurece dentro de la vesícula biliar, formando cálculos. Pueden causar dolor en diferentes lugares como:

  • La zona superior derecha del abdomen.
  • Justo debajo del esternón.
  • Entre los omóplatos.
  • En el hombro derecho

El dolor causado por los cálculos biliares puede durar desde unos minutos hasta varias horas. También se pueden experimentar síntomas como náuseas o vómitos.

7. Pericarditis

El pericardio recubre la superficie del corazón. La pericarditis se produce cuando este se inflama. Puede ser causada por una infección o una enfermedad autoinmune. También puede presentarse después de un infarto o una cirugía cardíaca.

La pericarditis causa un dolor agudo en el pecho, que puede empeorar al respirar profundamente, acostarse o tragar. El dolor también puede sentirse en el hombro izquierdo, la espalda o el cuello. Otros síntomas a tener en cuenta incluyen:

  • Tos seca.
  • Sensación de fatiga.
  • Ansiedad.
  • Dificultad para respirar al acostarse.
  • Hinchazón en las extremidades inferiores.

8. Dolor musculoesquelético

En ocasiones, los problemas musculares pueden causar dolor en el pecho y la parte superior de la espalda. El uso repetitivo o excesivo de varios grupos musculares, por ejemplo, al remar, puede provocar dolor en el pecho, la espalda o la pared torácica.

Otros síntomas que puede experimentar incluyen rigidez muscular, espasmos musculares y sensación de fatiga. El dolor también puede ser diferido, lo que significa que en realidad proviene de un problema en otra parte del cuerpo, aunque se sienta en el músculo.

9. Aneurisma aórtico

La aorta es la arteria más grande del cuerpo. Un aneurisma aórtico se produce cuando una parte de la aorta se debilita. En algunos casos, esta zona debilitada puede desgarrarse, lo que puede provocar una hemorragia potencialmente mortal. Esto se denomina disección aórtica. Muchas veces, u se desarrolla con muy pocos o ningún síntoma. Sin embargo, algunas personas pueden sentir dolor o sensibilidad en el pecho. En algunos casos, también puede presentarse dolor en la espalda. Otros síntomas a los que debe prestar atención incluyen:

  • Dificultad para respirar.
  • Tos.
  • Ronquera.

10. Cáncer de pulmón

El dolor de pecho y de espalda también puede ser un síntoma de cáncer de pulmón. Aunque el dolor de pecho es un síntoma común, el Instituto de Cáncer Dana-Farber informa que el 25% de las personas con cáncer de pulmón reportaron dolor de espalda como síntoma.

El dolor de espalda causado por la enfermedad puede ocurrir cuando un tumor en los pulmones comienza a ejercer presión sobre la columna vertebral. El dolor causado por cáncer de pulmón puede empeorar al respirar profundamente, reír o toser. Además del dolor de pecho y espalda, otros signos de cáncer de pulmón pueden incluir:

  • Tos persistente, que puede incluir tos con sangre.
  • Ronquera.
  • Dificultad para respirar o sibilancias.
  • Sensación de debilidad o fatiga.
  • Pérdida de peso inexplicable.
  • Infecciones pulmonares recurrentes, como neumonía.

El cáncer de pulmón es poco común en personas menores de 40 años. Casi el 50% de las personas que contraen cáncer de pulmón tienen 75 años o más.

Prevención

Estas son algunas buenas reglas generales para prevenir muchas de las causas del dolor en la parte superior de la espalda y el pecho:

  • Lleva una dieta saludable para el corazón.
  • Haz suficiente ejercicio.
  • Mantén un peso saludable.
  • Evita fumar y ser fumador pasivo.
  • Limita el consumo de alcohol.
  • Controla los niveles de estrés.
  • Manténte al día con las citas médicas de rutina y asegúrate de consultar al médico si aparecen síntomas nuevos o preocupantes.
  • Limita los alimentos que pueden provocar acidez estomacal.
  • Evita comer tarde o en grandes cantidades para prevenir los cálculos biliares.
  • Estírate adecuadamente antes de hacer ejercicio o practicar deporte para evitar lesiones o distensiones musculares.

Sobre el autor:

Patricia Matey

Patricia Matey

Licenciada en Ciencias de la Información (Universidad Complutense de Madrid. 1986-1991), es periodista especializada en información de salud, medicina y biociencia desde hace 33 años. Durante todo este tiempo ha desarrollado su profesión primero en el suplemento SALUD de EL MUNDO (22 años), luego como coordinadora de los portales digitales Psiquiatría Infantil y Sexualidad en el mismo diario. Ha colaborado en distintos medios como El País, La Joya. la revista LVR, Muy Interesante, Cambio 16, Indagando TV o El Confidencial. En este último ejerció de jefa de sección de Alimente durante cuatro años. Su trayectoria ha sido reconocida con los premios de periodismo de la Sociedad Española de Oncología Médica, premio Boehringer-Ingelheim, premio de la Asociación Española de Derecho Farmacéutico, premio Salud de la Mujer, premio de Comunicación del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid o Premio de Periodismo de Pfizer. Actualmente es la responsable de la sección Cuídate+ sobre longevidad saludable de 65YMÁS.

… saber más sobre el autor