Desde que en agosto la Agencia Tributaria comenzara a realizar las devoluciones de IRPF de los ejercicios fiscales 2019, 2020, 2021 y 2022 a los jubilados y pensionistas que cotizaron en las antiguas mutualidades laborales, los afectados han esperado pacientemente su dinero. Hacienda tenía cuatro meses y medio por delante para cumplir con el compromiso adquirido por María Jesús Montero con los mutualistas. Pero el tiempo se agota y el desánimo se extiende.
El buzón de 65YMÁS rebosa de nuevo cartas a la directora de lectores afectados, visiblemente enfadados y exhaustos. También se agota la paciencia de sindicatos y asociaciones de mayores. “Si la justicia, el Tribunal Supremo, ha dicho que tienen que pagar, pues oiga, páguenlo ya. ¿Cuál es el problema?”, dice a 65YMÁSJosé Luis Fernández Santillana, presidente de la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (@CEOMA_ong) y director del Gabinete de Estudios de la Unión Sindical Obrera, vocal de la Junta Directiva de JUPEN-USO. “Hablamos de personas mayores y no son grandes capitales. Qué bien le vendría a los mutualistas para acabar el año recibir su dinero, para estas de Navidad.”
Crecen los nervios y cunde el pesimismo
Los ánimos comienzan a caldearse, y los afectados se mueven entre el nerviosismo porque ven cómo corre el calendario y se acerca la fecha límite; el pesimismo, porque empiezan a perder la esperanza de que Hacienda cumpla su compromiso; y el enfado e indignación, por verse una vez más ninguneados.
“La gente se está poniendo nerviosa y con razón, porque se va acercando el plazo definitivo”, explica a 65YMÁSAnatolio Díez, Secretario General de la Federación de Pensionistas y Jubilados de UGT-UJP y también miembro del Comité Asesor de 65YMÁS. “De aquí a final de año aún quedan 20 días, no perdemos la esperanza”, prosigue. “Pero mucho nos tememos que al final no vayan a poder cumplir el plazo. Por mucho que en un momento determinado nos hayan dicho que sí, yo creo que no”, añade.
"Muchas personas están ya muy calientes”, coincide José Luis Fernández Santillana. “Cómo algo que inicialmente era sencillo, lo han complicado y retorcido, y sobre todo, haciéndolo muy gravoso para el ciudadano con tanto lío”, explica.
“Hay quien teme que Hacienda ha vuelto a parar las máquinas, pero no nos gusta hablar sin datos”, explica a este diario Enrique de Hoyos, vocal de la Junta Directiva de la Confederación Estatal de Asociaciones y Federaciones de prejubilados y jubilados de Telefónica, Confedetel. “Hemos activado otra vez la encuesta entre nuestros socios, para ver qué resultados obtenemos y cómo ha cambiado respecto a la encuesta anterior”.
“Está empezando a palparse en el ambiente el desánimo respecto a que cumplan con los plazos”, se lamenta Anatolio Díez. “Hay mucho desencanto”, añade José Luis Fernández Santillana.
Nueva oleada de cartas a la directora
Un buen termómetro de este nerviosismo de los jubilados lo tenemos en las Cartas a la directora de 65YMÁS. Sin llegar a recibir la avalancha de cartas remitidas hace poco menos de un año, cuando Hacienda suspendió las devoluciones y estableció un sistema injusto y farragoso… pero sí es cierto que en las últimas semanas se ha incrementado el número de cartas a la directora de 65YMÁS que se inquietan por no haber recibido aún su devolución. En los últimos días, se ha acelerado el ritmo de misivas recibidas.
“Tengo la mala suerte de ser de los que todavía no he sido agraciado con la devolución del pago del IRPF”, nos dicen un lector, Juan Manuel Sanchís. “Y no ha sido por falta de haberlo solicitado en Hacienda, puesto que en lo que va de año lo he pedido dos veces, teniendo en mi poder los justificantes de dicha solicitud. Pero este Gobierno está en el mundo de 'Alicia en el país de las maravillas'”, añade.
“Mi nombre es José Segovia Marcos y, lamentablemente, a fecha de hoy no me han realizado la devolución de IRPF ni de Mutualidades”, se lamenta este otro lector. “Comencé a cotizar en junio de 1964 y hasta 2025 ya llevan bastantes años con mi dinero en su poder. Parece ser que en este país hay dinero para todo menos para los que llevamos toda la vida cotizando”.
“Tengo 68 años y todavía no me han pagado lo de los mutualistas y a conocidos míos, desde septiembre ya les han pagado”, nos cuenta otra lectora, María León. Como a ella, otro lector, Valentín Pérez Murillo, nos confirma: “Aún no me han abonado el IRPF pagado indebidamente por mutualidades”. En la misma situación, Juan F. Rodríguez Toledo nos escribe: “Soy otro jubilado que habiendo reclamado la devolución, tampoco se han dignado de hacerlo. Los jubilados somos para los políticos una basura, solo nos quieren a la hora de las votaciones”. “Dos veces he hecho la reclamación”, coincide María José Sebastián Risco. “Soy pensionista y no me ha llegado nada”. Por su parte, José Fernández Valera dice: “A día de hoy todavía no he cobrado lo del IRPF antiguas mutualidades, supongo que como se ha ido diciendo lo pagarían este año, pero con solo un mes que queda del mismo… lo dudo. Hice la última solicitud en la campaña de la renta de este año, ¿todavía lo cobraré este año?” Se pregunta.
“Señora ministra la palabra hay que cumplirla, en este caso con los Mutualistas. Ya no cuela lo de que no hay dinero. Espero cobrar antes que finalice el presente año”, nos escribe, visiblemente enfadado, Juan García Tripiana.
“Esto es una vergüenza, dicen que hasta el 31 de diciembre hay tiempo de devolución, esperemos a ver qué pasa”, nos escribe María León. “Devuélvanme mi dinero, que ya está bien” increpa José Segovia. Es el sentir de todos aquellos afectados que aún no han recuperado su dinero.
La respuesta de Hacienda
Puestos en contacto con el Ministerio de Hacienda para conocer la evolución de las devoluciones, qué importes se han devuelto ya, a qué número de mutualistas, fuentes del departamento de María Jesús Montero se limitan a remitirnos al último informe mensual de recaudación tributaria. Ningún comentario a la pregunta de si cumplirán con el compromiso de pagar todo antes de final de año.
Y según el citado informe de recaudación tributaria, hasta octubre se habrían devuelto 2.350 millones de euros. “Desde agosto se han hecho devoluciones por un importe de casi 2.350 millones que, en términos diferenciales respecto al año anterior y contando desde enero, suponen un impacto diferencial respecto a 2024 de 1.936 millones, 645 más que lo que se recogía en el cuadro hasta septiembre”, señala el informe mensual de recaudación tributaria. No sabemos cómo habrá cambiado esta cantidad en noviembre.
También los sindicatos han pedido datos concretos a Hacienda, por el momento, sin respuesta. “Nosotros lo que hemos hecho ha sido dirigirnos al Ministerio para que nos diera la situación actual, para saber exactamente de qué estamos hablando y el grado de verdad en el cumplimiento de los pagos, al no haber un patrón definido”, nos explica Anatolio Díaz. “Hemos pedido datos concretos: cuánta gente se ha atendido, cuanto dinero se ha devuelto, cuanto falta por devolver. Y a quien se ha atendido, si ha sido de forma parcial o la devolución es competa… para poder hacer una valoración de la situación, con datos en la mano”, añade. “No es que no nos den una explicación, es que ni siquiera tenemos información, ni cifras concretas”, se queja, por su parte, Fernández Santillana.
Respecto a ese dato de ejecución presupuestaria, el dirigente de la federación de jubilados y pensionistas de UGT, considera que “con lo que se había pagado antes ya, las devoluciones hechas pueden rondar los 3.000millones más o menos. Pero eso no es solución, lo que nosotros queremos saber es, de verdad, cuánta gente queda por pagar”.
Explicaciones
Además de datos concretos sobre el estado de la cuestión, asociaciones de mayores y sindicatos, exigen explicaciones por parte del departamento que dirige María Jesús Montero.
“Lo que no se entiende es que se liara lo que estaba funcionando” señala José Luis Fernández Santillana en referencia al proceso de devoluciones que se inició en la primavera de 2024, que estaba funcionando bien y que, por sorpresa, el gobierno decidió anular hace ahora poco más de un año, haciendo creer a algunos afectados, que se trataba de una inocentada. “De repente, lo complicaron todo, la solicitud que ya se había hecho dejó de ser válida, había que pedirlo de nuevo, pero solo un ejercicio, y así año a año, durante cuatro largos años”, añade.
“Nos hemos dirigido al Ministerio para que nos de la situación actual. Y también una explicación acerca de por qué se ha hecho así y no de otra forma”, señala Antolio Díaz.
“Una cosa que era sencilla, que era de justicia, devolver a la gente lo que indebidamente se le había cobrado, no se hizo. Y todo ¿por qué? ¿Por ahorrarse dinero?¿Por qué se hizo esto? Alguien tendría que dar una explicación” dice el presidente de CEOMA. “Los mutualistas le han estado dando a la Administración un crédito a coste cero”, concluye.
El compromiso del Gobierno: pagar en 2025
En agosto se iniciaron las devoluciones, en cuanto se publicó en el BOE el cambio normativo que lo hacía posible, (la Disposición Final 16ª de la Ley 5/2005 de 24 de julio). El compromiso de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero fue realizar este cambio normativo y pagar antes de final de año. Así, antes del 31 de diciembre, se deberían realizar las devoluciones de los ejercicios 2019, 2020, 2021 y 2022. Montero también dijo que se haría en un único pago, cosa que no está ocurriendo.
“El compromiso del gobierno es que en el año 2025 iba a hacer frente a todas las reclamaciones. Y sin entrar en el incumplimiento de que se pagara todo de una vez, lo cierto es que había un plazo. Y por la situación en la que estamos, y con los patrones que se han seguido, difícilmente se va a cumplir”, se lamenta Anatolio Díaz, de UGT-UJP.
Devoluciones fragmentadas y sin orden
Además de los plazos, la queja más extendida entre los mutualistas afectados -así se desprende de las numerosísimas cartas a la directora recibidas en 65YMÁS- es la forma “errática” en que se están produciendo las devoluciones, lo que genera confusión entre los afectados.
“Los pagos se están haciendo de forma muy indiscriminada. Te devuelven el 2019 y el 2022 y los quedan en medio, 2020 y 2021 quedan pendientes; en otros casos saltan al 2020 directamente; o te pagan el último año dejan atrás el resto… y también es que verdad que hay gente a la que no le han pagado nada”, nos cuenta Anatolio Díaz. “Es todo un poco confuso, por decirlo de una manera suave”, añade.
“Nos consta que hay gente a que aún no le han pagado ni un duro, y otros a los que sí, todo el dinero o parte. Es decir, les han saldado alguno de los ejercicios fiscales, pero no los cuatro. Hay gente que lo ha pagado un año, hay gente que le han pagado dos, efectivamente, pero hay mucha gente que ninguno”, coincide Enrique de Hoyos.
“Es un cachondeo”, dice, mucho más gráficamente, José Luis Fernández Santillana. “Hay gente a la que le ha llegado todo, a otros parte y a otros no les ha llegado nada y ni siquiera les han contestado. Hay confusión, mucha gente no tiene claro si solo ha reclamado una año ahora lo va a recibir todo… es que han enredado mucho”, añade.
Y si no cumplen, ¿qué pasa?
Los afectados ya comienzan a pensar en el escenario que se abre a partir del día uno de enero, en caso de no haber recibido sus devoluciones de IRPF.
“En teoría el 31 de diciembre es el último día, ahí empezarían a contar intereses de demora adicionales” señala Fernández Santillana. “No nos vale que nos digan que nos van a pagar intereses. Los acuerdos son para cumplirlos y las resoluciones, también”, apostilla Anatolio Díaz.
“La respuesta que nos dan que es que van a intentar cumplir y, si no, siempre recuerdan que pagarán intereses, que están en poco más del 4%. Pero yo no quiero que me paguen intereses, quiero que cumplan con el compromiso que adquirieron en su momento con los agentes sociales, en este caso Comisiones Obreras y UGT en la reunión que tuvimos al efecto”, detalla el secretario general de UGT-UJP.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.