

Pasado mañana, 65ymas.com alcanzará el número 2.000. El pasado viernes cumplió tres años. La gran satisfacción de quienes hacemos este diario es dar fe de nuestra propia existencia. Ya tenemos una pequeña historia para poder decir, como Pablo Neruda, “Confieso que he vivido”. En la prensa digital no sentimos la emoción de la “tinta fresca”, pero en esta Casa sentimos la emoción de haber prestado y seguir prestando el más noble de los servicios: dar voz a quienes se les regatea la voz, que son los mayores; defender sus derechos ante los poderes públicos; elevar la protesta ante quienes los marginan o los olvidan; denunciar las injusticias, los abusos y los fraudes; pero también orientarles en su ocio y en sus aficiones y en los placeres de la vida para que puedan disfrutar en plenitud de su existencia. Todo eso lo hizo una empresa con vocación de servicio y un equipo humano entregado y con un profundo sentido de su deber profesional. De ese equipo quiero destacar especialmente a Ana Bedia, la directora, y a una redacción a la que solo puedo dar un calificativo: magnífica. Y a ustedes, nuestros ocho millones de lectores, les renuevo los compromisos con los que hemos nacido: el servicio y la utilidad.