Teresa Rey
Preguntas
Cómo leer y entender el prospecto de los medicamentos
Todos se estructuran en los mismos apartados y los expertos recomiendan guardarlos siempre
El prospecto de los medicamentos es en general muy denso, y su letra pequeña a veces provoca cierto rechazo a primera vista. En ocasiones nos quedamos nada más con la pauta que nos indica el médico a la hora de ingerirlo, pero este papel que se añade en todos los fármacos ofrece una información importante que es conveniente leer antes de tomarlos al menos por primera vez. Y, según los expertos, siempre hay que conservarlo para futuros usos.
Apartados
La ventaja es que todos los prospectos están estructurados con los mismos apartados, con la finalidad de hacer más legible la información al usuario:
- Qué es y para qué se utiliza (composición e indicación)
- Antes de tomar (indicaciones)
- Cómo tomar (posología)
- Posibles efectos adversos
- Conservación
Qué es y para qué se utiliza
Nos aparece la composición del medicamento (las sustancias que tiene). Además, su nombre, cantidad y presentación (cápsulas, jarabe…). Se especifica también para qué está indicado y cuál es su mecanismo de acción.
Antes de tomar
En este apartado se detallan todos aquellos casos en los que el fármaco no se puede tomar. Aunque se supone que el médico conoce nuestra historia clínica y no nos va a prescribir algo que no podamos ingerir, esta información es importante pues nos ofrece ciertas precauciones. Aquí se incluyen también supuestos en los que se nos aconseja informar a nuestro médico si los sufrimos y otra serie de medidas dependiendo de cada producto. Algunas están relacionadas con el embarazo o lactancia, otras con el riesgo cardiovascular y, por último, las posibles interacciones.
Cómo tomar
Aquí se nos dan las instrucciones de cómo hemos de tomar el medicamento, su posología. Las dosis recomendadas, aunque en este caso prevalece lo que el médico nos haya dicho. A veces estas se deben ajustar si se trata de personas mayores o de niños, o incluso con personas que presentan alguna disfunción en alguno de sus órganos.
Al mismo tiempo se explica qué debemos hacer en el caso de ingerir una dosis mayor de la recomendada o si se nos ha olvidado tomarlo.
Posibles efectos adversos
Este punto recoge todos los efectos secundarios que este medicamento ha producido en algunos pacientes tanto durante su periodo de investigación como tras su comercialización. Ahora bien, esto no quiere decir que los experimenten todas las personas. Si suceden, suele ser de forma leve y en caso contrario debemos informar a nuestro médico o farmacéutico y comunicarlo, si es necesario, al servicio de reacciones adversas de medicamentos de la Agencia Española del Medicamento (Aemps).
Conservación
En este caso se nos dan las pautas para conservar de forma adecuada el fármaco. Debes recordar que algunos de estos artículos deben mantenerse en unas condiciones de humedad y temperaturas concretas.