En la mayor parte del territorio la mascarilla es obligatoria y en el resto recomendada para evitar contagios de la temida covid-19. Pero, ¿la utilizamos siempre correctamente?¿Qué hacemos cuando lo llevamos puesta? ¿Dónde la colocamos al sentarnos en una terraza?
No es una cuestión menor, si no nos preocupamos de dónde colocar la mascarilla podemos convertirla en un importante foco de bacterias e incluso de hongos que puede producir una alergia atópica con facilidad.
Para evitarlo, se recomienda no llevarla puesta durante más de cuatro horas y, de reutilizarla, guardarla en un sobre de papel o en el mismo envase en el que nos han sido dispensadas en la farmacia y, a ser posible doblada sobre sí misma de forma que la parte interna que va a estar en contacto con nuestra boca quede protegida.
Pero este es tan sólo uno de los siete pecados capitales que podemos llegar a cometer con nuestras mascarillas de protección. Estos son los siete errores más comunes que cometemos
1. No lavarte las manos antes de usarla.
2. Ajustarla mal: debe cubrir boca, nariz y barbilla.
3. Tocarla mientras la llevas puesta.
4. Dejarla en la mesa, ponérsela sobre la barbilla o el codo o guardarla en el bolso o bolsillo cuando te sientas en una terraza de un bar o restaurante.
5. Usarla más de cuatro horas. Si se humedece o deteriora, hay que cambiarla. Nunca reutilices, salvo que sean aptas para ello.
6. Quitarla mal. Hay que retirarla por la parte de atrás, sin tocar la parte frontal.
7. Tirarla de manera imprudente. Deséchala en un cubo cerrado y lávate las manos con agua y jabón.
Los pasos a seguir antes de ponerse una mascarilla son:
Una vez ajustada la mascarilla no se debe tocar la mascarilla nunca con las manos, y si se necesita tocar la mascarilla, se deben lavar previamente las manos con agua y jabón o frotárselas con una solución hidroalcohólica. Tampoco se debe colocar en una posición de espera en la frente o debajo de la barbilla ni durante ni después del uso.
Si nos sentamos en una terraza de un bar o restaurante, no debemos airear la mascarilla usada ni meterla en el bolso o en un bolsillo. Tampoco debemos dejar la mascarilla encima de la mesa ni colgárnosla del brazo. De esta manera, evitaremos esparcir patógenos y contagiar a terceras personas en caso de que la mascarilla que hayamos utilizado esté contaminada. En su lugar, hay que guardarla en un sobre de papel porque no retiene la humedad. En caso de que no dispongamos de un sobre de estas características, también podremos utilizar una tela o una funda de gafas.
Para retirar la mascarilla los pasos a seguir son: