Anna Freixas: "Hay que desdramatizar la menopausia y dejar de hacer negocio con ella"

El boom de la menopausia: de tabú a creciente "negocio millonario"

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La menopausia y todo lo que la rodea está experimentando una importante transformación cultural, médica y social en los últimos. años. Lo que durante décadas fue un tema tabú, que ni siquiera se hablaba entre mujeres, ha pasado a ser un "floreciente mercado millonario", que incluye desde libros, start ups dedicadas a ello, nuevos tratamientos médicos (como terapias hormonales sustitutivas, y nuevos fármacos) a una explosión de productos de consumo (como suplementos nutricionales, cosméticos, yogures, aplicaciones), tal como recogía hace unos meses 65YMÁS en un amplio reportaje.

Y es que se estima que más de 8 millones de mujeres en España están en edad de tener la menopausia, entendida como un periodo de grandes cambios hormonales y físicos sobre los que hasta hace poco no había apenas información, que se suele presentar entre los 45 y los 55 años, según el Instituto de la Menopausia. Para hablar sobre cuánto hay de "menowashing' – utilización por parte de los negocios–, y cuánto de preocupación real por esta etapa vital, hablamos con la gerontóloga feminista y autora de Nuestra menopausia: una versión no oficial (Capitán Swing), Anna Freixas, quien recalca la necesidad de informar más y no asustar a las mujeres con que llega "el final de la vida".

PREGUNTA.- Eres una de las expertas que más ha trabajado por desdramatizar la menopausia. Pero es que en los últimos años proliferan libros de la menopausia, startups de la menopausia, nuevas terapias, e incluso en Estados Unidos se están haciendo fiestas de la menopausia lideradas por famosas... ¿Cómo calificarías el boom actual que hay en torno esta etapa vital en todo el mundo?

RESPUESTA.- Bueno, yo creo que tiene aspectos positivos y negativos. Positivos en la medida en que se supone que se habla de algo que siempre se ha mantenido un poco tabú. Por lo tanto, creo que es bueno hablar de la menopausia. Pero lo importante es ver cómo se habla y de qué se habla. Si se habla para asustar con que viene el fin de la vida, de la vida sexual, afectiva... y el principio del abandono y de la soledad, pues fatal. 

Pero si esto sirve para poder hablar e informar mejor a las mujeres. Si es para desdramatizarla, tener más conocimiento y poder hablar de los aspectos que contribuyen a una mejor o peor vivencia de la menopausia, pues bienvenido sea. 

P.- Claro. Y, ¿cómo podríamos diferenciar los reclamos que son puro marketing y los que suponen una preocupación real por esta etapa vital? 

R.- El negocio yo creo que se ve venir. Es decir, cuando lo que se anuncia se centra en combatir los "síntomas", cuando en realidad son signos de la menopausia, porque ésta no es una enfermedad, esto ya es una señal de alerta. Yo creo que si estamos informadas, pues sabemos que hay algunos signos que indican que hay una evolución en las hormonas y que determinados estilos de vida, como cambios en la alimentación o el ejercicios, pues pueden contribuir a mejorarlos o a evitarlos o a vivirlos de otra manera.

Todo esto también tiene una relación muy importante con las actitudes interiores que la gente tiene frente a la menopausia. Si tú no lo ves como un problema, pues no buscarás una solución mercantil. Además es que muchas de las soluciones que ofrecen son engañosas. Es decir, que no tienen evidencia científica avalada o te ofrecen algo que en realidad está demostrado que tiene un alto nivel de peligro en términos de cáncer de mama, de trastornos de circulación, ictus, etcétera.

"Si tú no lo ves como un problema, pues no buscarás una solución mercantil"

P.- ¿Te refieres a las terapias hormonales? 

R.- Sí, me refiero a soluciones que se ofrecen como panacea que no está claro que vayan a facilitar la vida sexual o la salud de las mujeres. Esto comenzó con las terapias hormonales, pero ahora ya incluso hay yogures que dicen que hay que tener en cuenta que el colesterol sube con la menopausia. Y el colesterol no sube con la menopausia, el colesterol sube con la edad, con el tipo de vida, con la alimentación, es decir, sube porque tus venas se estrechan. Es evidente que el colesterol no te subirá a los 3 años, si no a los 50 o a los 40. años... O sea, que casi la clave para desterrar todo esto es informarse y acabar con los mitos. Si tú sabes que esto no depende la menopausia, pues no caes en esa trampa.

P.- Claro, lo defines como "caer en la trampa"...

R.- Sí, es que también hay que plantearse quién hace caja con esto que te están diciendo. Es evidente que aquí alguien se beneficia económicamente de tu salud... Por eso yo creo que, por ejemplo, pues las redes que hay de mujeres y salud son de gran importancia para que la gente pueda no caer en estas trampas. Pongo el ejemplo de los pellets para la menopausia que se ponen ahora incluso en centros de estética. O sea, eso ya te explica de que estamos hablando de un negocio, ¿no?

P.- Para los que no lo sepan, ¿puedes explicar qué son los pellets?

R.- Los pellets para la menopausia son una nueva fórmula de la terapia hormonal que te dicen que es una terapia personalizada y te introducen un pellet, que es como una cápsula pequeña en la piel. Esto lo hacen en centros de estética, ni siquiera en centros médicos y es un peligro. Está clarísimo que aquí hay un negocio que tiene que ver con la estética y no con la salud.

"Con los pellets está  claro que hay un negocio que tiene que ver con la estética y no con la salud"

P.- ¿Por qué piensas que ahora el mercado se ha centrado en las mujeres sénior? ¿Por su mayor poder adquisitivo? 

R.- Claro, y porque además, las mujeres han dejado de tener hijos. Antes los ginecólogos hacían negocio con la cantidad de críos que tenía la gente, pero las chicas ahora no tienen criaturas, o tienen muy pocas. Y entonces, ¿qué pasa? Pues ellos un día vieron que la menopausia la íbamos a tener sí o sí. Entonces, aquí se produjo una de las cosas para mí más graves que ha sido la utilización del cuerpo de la mujeres para hacer un gran negocio. En su día estaba la píldora, que también tenía efectos en los cuerpos de las mujeres y en cada etapa quizás se busca una cosa.

Otro tema es que un mes después de la publicación de mi libro, en marzo de 2024 salío un número de The Lancet, que el la Biblia de la clase médica, en el que dicen que ha llegado el momento de tener una conversación equilibrada sobre la menopausia. Además, hacen un reconocimiento de que la menopausia no es una enfermedad y que por lo tanto no debe ser tratada con medicamentos, sino mirando la vida de las mujeres. 

P.- ¿Cómo influye la cultura de querer soluciones rápidas a problemas complejos? 

R.- Efectivamente, luego está el tema de que queremos soluciones rápidas. Me pasa una cosa y quiero solucionarla rápida. Y a lo mejor por eso se cae en terapias hormonales, no lo sé. Y también en eso se basan las falsas promesas. El ejemplo más básico es el de los sofocos, que es el signo más evidente, más corriente, - bueno, lo tienen menos del 40% de las mujeres, o sea, que tampoco es tan alto–.  Entonces tú tienes sofocos y te dicen, pues mira, te voy a dar unas pastillas, un tratamiento que te va a quitar los sofocos y vas a estar tranquila.

Pero no te advierten de que una vez dejes de tomar la medicación, los sofocos volverán. Y además los sofocos tienen una relación muy alta con el estrés y la menopausia se produce en un momento de la vida en que las mujeres tienen muchos frentes que producen estrés tanto a nivel laboral como a nivel afectivo, familiar, de cuidado de madres y padres y todavía de criaturas, etcétera. Es decir, la menopausia no se produce en el vacío, sino en un momento clave en la vida de las mujeres.

P.- Entonces, ¿cómo hay que abordarlo?

R.- Si en vez de buscar soluciones rápidas, te preguntas cómo estás viviendo, qué estilo de vida tienes, cuáles son las tensiones fuertes que estás viviendo en este momento en tu vida ... O sea, lo que se debe hacer es ver qué cosas puedes mejorar en tu vida para que estos estos sofocos disminuyan en términos de alimentación, en términos de estilo de vida, en muchos aspectos. Pero claro, tú quieres que te ayuden a sobrellevar tu situación, y todo esto es mucho más complejo...