Maria Luisa Merlo, la actriz que desde que nació respira teatro por los cuatro costados

Nuria Espert I Lola Herrera I María Galiana I Concha Velasco I Rosa María Sardà I Carmen Maura I Loles León I Charo López

Desde que debutó siendo casi una niña en Te espero en el Eslava, María Luisa Merlo ha trabajado en cine, teatro, televisión. Ha hecho de todo y siempre tan bien que es una de las actrices más queridas de nuestra escena, tanto por el público como por sus compañeros de profesión.

Nació el año 1941 y desde entonces ya empezó a respirar teatro y es la clave de bóveda de varias dinastías que durante más de medio siglo llevan escribiendo grandes páginas de nuestra escena. Hija de dos grandísimos actores María Luisa Colomina e Ismael Merlo que más tarde se casó en segundas nupcias con la actriz Vicky Lagos, hija natural de Vittorio de Sica inscrita en el Registro Civil con los apellidos de  su padre adoptivo y hermana de las actrices Mara, María José y Conchita Goyanes con lo que la Merlo enlazó con esta ilustre dinastía teatral. Posteriormente Larrañaga volvió a contraer matrimonio y la actriz y dramaturga Ana Diosdado. 

“Me he criado en una familia con un gran sentido del humor y en un ambiente tan liberal que ni siquiera el matrimonio existía”, explica la propia artista con el buen humor que siempre la ha caracterizado.

Más dinastías. Casada durante 16 años con el actor Carlos Larrañaga, hijo de la insigne actriz María Fernanda Ladrón de Guevara, y hermano de Amparo Rivelles. Con el actor tuvo María Luisa tres hijos, la actriz Amparo Larrañaga, el actor Luis Merlo y Pedro Larrañaga marido de Maribel Verdú desde hace casi 20 años.

Tras su separación de Larrañaga, María Luisa que ha declarado que "a Carlos Larrañaga lo seguí queriendo después de divorciarnos", se volvió a casar  en 1992 con el profesor universitario Michael Kenton, del que se divorció cinco años después.

Por cierto, aprovechemos para recordar que su padre siempre fue el gran amor de María Luisa Merlo que en sus memorias, publicadas en 2003 con el título de Más allá del teatro, la actriz explicaba sobre Ismael Merlo: “No soy una Electra, porque no hubo una relación amor/odio con mi padre, sino sólo una relación de amor fortísima, él es el primero que me enseña esa relación de amor en libertad… la cagada de mi vida ha sido buscar a papá para encontrar solo hijos. Seguramente mi padre conmigo era maravilloso y con los demás un desastre. Seguramente, el intentar buscar lo que me daba mi padre a mí en otros hombres ha sido un error absoluto”. También en sus memorias confesó haber tenido problemas con el alcohol y las drogas como consecuencia de la depresión que le produjo la muerte de Ismael Merlo en 1984.

Comenzó su carrera con tan solo 17 años cuando Luis Escobar, el entrañable marqués de Lequineche en La Escopeta Nacional de Berlanga, le ofreció aparecer en el reparto de un musical que hizo época, Te espero en el Eslava, como joven pareja de Pedro Osinaga para enfrentarse a la pareja protagonista que formaban nada menos que Nati Mistral y Tony Leblanc.

En el cine debutó un año después, a las órdenes de José María Forqué, en la película De espaldas a la puerta, a la que seguirán 091 Policía al habla, Siempre es domingo, Cuidado con las personas formales, Más bonita que ninguna, De cuerpo presente...

Sin dejar de lado al cine con películas posteriores como Tocata y fuga de Lolita, Un lujo a su alcance, ¿Por qué no hacemos el amor?... a partir de mediados de los años sesenta María Luisa Merlo decide centrar más su carrera orientándola al teatro y la televisión donde rápidamente se convirtió en uno de los rostros más habituales de espacios dramáticos como Primera Fila, Novela o Estudio 1.

También para TVE protagonizó, en 1973 y junto a su entonces marido Carlos Larrañaga, la comedia Compañera te doy. 13 años más tarde encarnó a Rosa, la madre de Julia, interpretada por su hija en la vida real, Amparo Larrañaga, en la serie Media naranja. Experiencia que volvió a repetir, en esta ocasión junto a su hijo Luis Merlo en 2006, dando vida a Leonor, la madre de Mauri, en Aquí no hay quien viva. Tampoco nadie olvida otras series en las que María Luisa Merlo trabajó como Aquí hay negocio, Luna negra, Mis adorables vecinos, Supervillanos, Los Serrano, Somos complices…

Por lo que al teatro se refiere el listado de obras que o ha interpretado es prácticamente inabarcable, El proceso de Mary Dugan, Vidas privadas, Cómo ama la otra mitad, Pato a la naranja, los hijos de Kennedy, Alicia en el París de las maravillas, El corto vuelo del gallo, Diálogo secreto de Antonio Buero Vallejo en la que trabajó junto a su padre, Los locos de Valencia, Antes que todo es mi dama, Trescienntos veintinuo, trescientos veintidós, Los bellos durmientes de Antonio Gala junto a su hija Amparo Larrañaga, Odio a Hamlet, Ocho mujeres, La fiebre del heno, El adefesio, La ratonera, Cosas de papá y mamá, Yo, Leonor de Aquitania… y así hasta hoy en día cuando ésta actriz irreductible e irreemplazable representa por toda España Mentiras inteligentes, dirigida por Raquel Pérez a partir de un texto original de Joe Diprieto.