Sociedad

Mayores que arrasan bailando en TikTok: "Están asombrados de verse en los medios"

Paula Buedo

Foto: Big Stock

Domingo 18 de diciembre de 2022

5 minutos

Su perfil acumula más de un millón de “me gustas”

Mayores que arrasan bailando en TikTok: "Están asombrados de verse en los medios"
Paula Buedo

Foto: Big Stock

Domingo 18 de diciembre de 2022

5 minutos

El centro de día Luz de Luna, en Santander, se ha hecho un hueco entre los perfiles preferidos de los usuarios de TikTok. A golpe de baile y trend, sus vídeos se han hecho virales y algunos acumulan hasta un millón de reproducciones.

No son pasodobles ni bailes clásicos. Los mayores también disfrutan con temas más actuales y movidos. Anuel AA, Omar Montes o Aitana son algunos de los cantantes que suenan en su perfil y a los que han dedicado una coreografía.

Sin miedo al perreo y a los pasos de moda que arrasan en las redes sociales, el centro Luz de Luna ha encontrado una fórmula que entretiene y divierte a los mayores a la vez que establece una nueva vía de contacto con las familias y con toda la comunidad tiktoker.

Precisamente, el primer objetivo de la cuenta era el mero entretenimiento. La idea de abrir el perfil surgió en verano durante una de las muchas excursiones que se hacen en el centro. Después de una comida, Alba Haro e Irantzu López, las trabajadoras del centro que aparecen en los videos junto a los mayores, se animaron a subirse a la ola del éxito en TikTok de muchos influencers.

A la vez, esto permitía que las familias estuviesen más cerca, pues podían ver lo que hacían en el día a día. Lo que no se esperaban es que las visitas comenzaron a subir a gran velocidad y los vídeos se hicieron virales. Empezaron a llegar comentarios de personas de todo el mundo y, casi sin darse cuenta, han llegado a acumular casi 35.000 seguidores.

Los reyes y reinas de TikTok

“Cuando empezamos a tener seguidores y se lo contábamos, que había comentarios de otras partes del mundo, se asombraban”, cuenta Alba a 65YMÁS. Sin embargo, al no ser usuarios habituales de las redes, ese enorme número de seguidores no era tan relevante. La verdadera sorpresa ha venido al hacerse un hueco en los medios de comunicación. “Ahora, cuando se han visto en la televisión y en la prensa y sus familias se lo cuentan, ellos lo han empezado a ver más real y están súper ilusionados”, añade la cuidadora.

Estos pequeños vídeos se han convertido en una de las actividades preferidas de los mayores. Alba explica que “llegan por la mañana y nos dicen que si hacemos algún baile para subir”. Los trends virales ya son parte del día a día del centro.

El reconocimiento no viene solo por parte de sus seres queridos, que cada día puede ver a sus familiares disfrutando del divertido entorno que ha creado el centro y les transmiten lo orgullosos que se sienten de ver lo que hacen. Ahora, también disfrutan de que el resto del mundo los ve y lo pasa bien con ellos. La cuidadora cuenta que una de las participantes de los vídeos relataba que un desconocido le había dicho que era famosa y “la reina de TikTok”.

Cómo es la gestión de la cuenta

Junto a su compañera Irantzu, Alba se encarga de manejar la cuenta. Tiene abierto el perfil en su móvil personal y se dedica a responder comentarios y subir los vídeos. Además, después del trabajo, se comparten contenido, audios en tendencia e ideas para seguir grabando al día siguiente. “Vemos lo que hacen otros tiktokers que ha funcionado bien y pensamos si podemos adaptarlo al centro y que lo hagan los abuelos, como les llamamos nosotras”, explica a 65YMÁS.

Suben entre dos y tres vídeos a la semana. Algunos requieren material, como sus últimas grabaciones navideñas, y otros tan solo ganas de aprender los pasos de baile. Aunque los vídeos apenas duran uno o dos minutos, la preparación que hay detrás de ellos es mucho mayor. En algunos, incluso se han animado a cantar sus propias canciones. Se atreven con todo, desde el rap hasta con los villancicos.

Pese al buen resultado, Alba también recuerda que empezaron el proyecto con algo de miedo. Temían las críticas y comentarios negativos, tan frecuentes en las redes sociales cuando los contenidos se viralizan. Siendo un centro de día, donde hay mayores, trabajadores y familias detrás, este peligro estaba muy presente: “Siempre queda ahí la cosa de si algún día alguien comenta algo negativo, porque no nos gustaría”.

“Lo que queremos transmitir es que lo hacemos por divertirnos y creemos que es bueno para ellos, que les ha traído muchos beneficios”, reflexiona Alba. El perfil del centro sigue generando interés y divirtiendo a los mayores que se graban y al público que los sigue. Así, estos mayores han arrasado en la red social y se han convertido en unos influencers atípicos, pero con las mismas ganas de pasarlo bien que los demás.

Sobre el autor:

Paula Buedo

… saber más sobre el autor