El clásico gotelé en las paredes de nuestra casa tiene los días contados. Las nuevas tendencias decorativas apuestan por vistosos y coloridos papeles pintados para darle un toque único a las estancias de nuestro hogar, al igual que ocurría unas décadas atrás. Si te has animado a decorar una habitación con estos originales acabados te contamos los trucos necesarios para colocarlos de una forma profesional y que no desesperes a la hora de pegarlos.
Antes de nada, haz un repaso a todos los materiales que necesitas para llevar a cabo esta actividad de bricolaje: papel pintado, cola para empapelar, rodillo y esponjas, espátula, metro, tijeras, un nivel y una escuadra para dejarlos rectos y perfectos. Imprescindible, un poco de paciencia y algo de maña.
De forma previa tienes que hacer un repaso al estado de la pared que quieres empapelar. Debes estar lisa para que el papel se adhiera perfectamente. Si hay gotelé o restos de un antiguo papel pintado es el momento de quitarlos, así como de reparar todos los desperfectos que haya. Grietas, agujeros o desconchones que pueden arreglarse con material de relleno aplicado con una espátula.
Una vez seca la pared, líjala y ya está lista para empapelar.
La mayoría de los fabricantes de papel pintado comparten las mismas instrucciones a la hora de colocarlo. Pero nunca está de más hacer un repaso a las mismas por si hay algunas consideraciones previas que no debes olvidar. Una vez hecho esto, nos ponemos manos a la obra: