Investigadores han descubierto que el medicamento para la menopausia, fezolinetant, reduce la frecuencia y la gravedad de los sofocos de forma segura y sin graves efectos secundarios durante 24 semanas. Así lo ha determinado una investigación presentada en el 26º Congreso Europeo de Endocrinología en Estocolmo.
Los síntomas vasomotores (VMS), más conocidos como sofocos y sudores nocturnos, afectan al 80% de las mujeres durante la menopausia y pueden afectar gravemente su vida diaria, como en la realización de ejercicio o los momentos de descanso, tal y como señalan en una nota de prensa.
"Laterapia de reemplazo hormonal(TRH) es el tratamiento más eficaz, pero no es adecuada para algunas mujeres, como las supervivientes de enfermedades endocrinas, cáncer o aquellas que tienen presión arterial alta no tratada", explican, mientras que otras deciden no seguirla por los posibles efectos secundarios.
Así, este fármaco preventivo no hormonal, el fezolinetant, aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) y la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) en 2023, "actúa directamente en la vía de control de temperatura y alivia estos síntomas", aseguran, aunque no actúa sobre otros síntomas, como los cambios de humor o la sequedad vaginal.
Ensayos clínicos anteriores ya demostraron los beneficios de este medicamento reduciendo la frecuencia y la gravedad de los sofocos, sin embargo, este estudio es el primero que investigó su efecto a más largo plazo, durante 24 semanas. Para ello, se examinaron a 453 mujeres de entre 40 y 65 años que presentaban sofocos moderados o intentos y que no eran aptas para la terapia de reemplazo hormonal.
Los investigadores observaron que las mujeres que tomaron fezolinetant tuvieron sofocos menos frecuentes y de menor intensidad durante 24 semanas, especialmente durante la primera. "El fezolinetant fue eficaz y bien tolerado durante 24 semanas y el efecto se observó ya en el día 1 de tratamiento", asegura el profesor Antonio Cano, del Instituto de Investigación INCLIVA, en Valencia, quien participó en el estudio.
Considera, así, que este medicamento, "seguro y eficaz", puede ayudar a "un gran número de mujeres" a mejorar "su salud general, calidad de vida y desempeño laboral". Apunta, sin embargo, que los síntomas "varían en prevalencia o intensidad dependiendo del origen étnico", por lo que "se necesitan más datos clínicos en diferentes poblaciones o áreas geográficas del mundo".
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.